Invitado por Fonapas Baja California Sur, Harry Crosby participó en la VI Semana de Información Histórica efectuada en La Paz durante mayo de 1984 con la conferencia “Actualidad de los antiguos californios”.
Llegó precedido de prestigio legítimo como explorador de la península californiana y por sus libros The King’s Highway in Baja California (El camino real en B. C.), The Cave Paintings of Baja California (Las cuevas pintadas de B. C.) y Last of the Californios (Los últimos californios), todos editados por Copley Books, de La Jolla, Alta California, que es también lugar de residencia de su autor.
Este último fue traducido por Enrique Hambleton, a petición de Fonapas, y publicado por esta misma institución sudcaliforniana, mediante la debida autorización de Crosby, con el título de Los últimos californios, en 1992, ya convertido con gran mérito en uno de los clásicos de la bibliografía de tema californiano.
Precisamente, en el primer párrafo de su conferencia, se refiere a que éste, “el más reciente de mis libros, fue escrito como homenaje al admirable pueblo que he conocido a través de unos quince años de viajar por las sierras centrales de [la península de] Baja California a lomo de mula. Al inicio de mis indagaciones sobre su pasado histórico, me di cuenta de inmediato que eran, de hecho, los descendientes directos de los pioneros colonizadores hispánicos que poblaron las Californias durante el siglo XVIII. Esto contribuyó en gran parte al interés potencial de mi trabajo en la California norteamericana, puesto que significaba que estos montañeses peninsulares descendían también de los primeros pobladores de la Alta California.”
Ahora nos llega la noticia grata, mediante nota titulada “Informe fronterizo”, de Sandra Dibble en Voice of San Diego (2 de mayo de 2022), de que, bajo la dirección de Isaac Artenstein, se está realizando el filme "The Journeys of Harry Crosby" (Los viajes de Harry Crosby), de una hora de duración. Se trata de un documental que explora, según la reportera, “cómo los viajes de un hombre capturaron la magia de la península de Baja California.”
Explica Sandra que “Como la mayoría de los periodistas que cubren la región de San Diego-Tijuana, he pasado la mayor parte de mi tiempo investigando eventos que cambian rápidamente cerca de la frontera entre Estados Unidos y México. Pero hay otro mundo, a sólo unas pocas horas conduciendo por la Carretera Transpeninsular, de paisajes salpicados de rocas y cactus gigantes, ranchos de montaña aislados, misiones españolas y murales indígenas que hablan de una época en la que no existía la frontera.”
Entrevistas, filmaciones y fotografías integran la coproducción de la compañía de Artenstein, Cinewest y el San Diego History Center, en Balboa Park. La información añade que, por su parte, Cinewest pretende transmitir pronto con Public Broadcasting Service, así como con Canal 22, la principal cadena de televisión cultural de México, el producto fílmico que va tras agotadoras expediciones en los decenios de 1960, 1970 y 1980 en la península californiana. “Es un testimonio de la obra de Crosby, pero también de una parte única y poco conocida de México. Entre lo más destacado se encuentran las conmovedoras e íntimas fotografías de rancheros de Crosby, cuyos antepasados se asentaron por primera vez en la región cuando no había frontera” entre las Californias continental y peninsular.
“Probablemente la mitad de los ranchos de montaña a los que fui están abandonados ahora”, dice Crosby en el documental, nutrido del trabajo de Harry en blanco y negro, con su cámara Canon de 35 milímetros. “Un tesoro nacional”, lo llama Artenstein, quien confesó a la periodista: “Quiero que la gente, especialmente en esta región, adopte la identidad de California de una manera muy profunda”.
Según la señorita Dibble, el material permitirá apreciar contribuciones como la de Norman Roberts, cuya Baja California Plant Field Guide (Guía de plantas del campo de Baja California) hizo descripción de muchas especies de plantas endémicas de la península. Igualmente la de la fotógrafa Eve Ewing, acompañante de su padre oceanógrafo quien en los años de 1950 realizaba un censo de ballenas grises en laguna Ojo de Liebre, y concedió una entrevista para la película.
Por todo ello, los californios peninsulares estaremos de acuerdo en que es hora ya de al menos abonar la enorme deuda de reconocimiento y gratitud a que Harry Crosby se ha hecho acreedor por sus infinitas aportaciones al saber y la difusión de las raíces, cultura y significación histórica y presente de los antiguos californios.
