La Paz, Baja California Sur.- Una de las anécdotas inéditas de la peluquería "El Zurdo" fue que un día estuvo a punto de ser dinamitada por un mal corte de cabello.
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En la calle Belisario Domínguez frente al Teatro Juárez en el centro histórico de la ciudad de La Paz se ubica la peluquería “El Zurdo” fundada en el año de 1920 y según afirma su actual propietario el peluquero Rodrigo Ramos Gallardo es la peluquería más antigua de La Paz aún en operación, al entrar al establecimiento se observan cientos de fotografías que muestran innumerables personas y pasajes de la historia del lugar.
La anécdota es narrada en un artículo exhibido en la puerta de cristal pero no se profundiza en los detalles del acontecimiento, solo se menciona con melancolía que fue el último corte que realizó el anterior peluquero, Enrique Ramos Lemus, padre de Ramos Gallardo y testigo del acontecimiento, el dato se encuentra en una de las puertas de cristal, en uno de los artículos escritos por la periodista Manuelita Lizarraga Alcaraz “La Paz que se perdió”.
El artículo lleva el título “De Gran Tradición peluquería El Zurdo Frente al Cine Juárez”, al centro del escrito se muestra la fotografía del peluquero Enrique Ramos Lemus padre del actual propietario, y en él se narran pasajes de la historia de la peluquería, se detallan datos interesantes como que originalmente fue atendida por Liborio Barrera, Carlos Espinoza, Rufio Bustamante para pasar a ser propiedad de Enrique Ramos en el año de 1955.
La autora del artículo escribe que la peluquería El Zurdo está impregnada de historia, chascarrillos y anécdotas de los clientes y casi al final de su texto está redactada una anécdota sobre un agricultor del Valle de Santo Domingo de nombre Alberto Poloni a quien le cortó una patilla dejándole solo una, con esta anécdota cierra el artículo dando a conocer que el corte fue el último corte que realizó en su vida el peluquero Enrique Ramos.
MANEJO DINAMITA Y VOY A VOLAR LA PELUQUERÍA
Sobre la melancolía histórica su hijo Rodrigo Ramos proporciona algunos detalles inéditos sobre esa historia ya que el trabajaba con su padre en la peluquería y tiene presente lo que sucedió recuerda que la persona que era cliente frecuente de la peluquería y que efectivamente el cliente era originario del Valle de Santo Domingo cuenta que la persona llegó al sillón y le dijo su papá “quiero la patilla diagonal”.
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Pero al realizar el corte de cabello, su padre le hizo un corte en vertical muy agudo en una patilla y el cliente se molestó mucho y le reclamó “así no es diagonal” y su padre y le respondió “tengo 30 años de peluquero cómo no voy a saber que es diagonal” entonces el cliente insultó a su padre y el asunto no terminó ahí, el cliente se levantó y le dijo “yo me dedico a trabajar en las minas y manejo la dinamita en la noche voy a venir a volar tu peluquería”.
