El pasado domingo 4 de abril, iniciamos una jornada más en lucha por la transformación de Baja California Sur; iniciamos nuestra campaña electoral por la Coalición Morena-PT “Juntos haremos historia en Baja California Sur”, realizando cinco actos políticos en las cinco cabeceras municipales de la entidad, dándole la importancia que merecen todas las regiones del estado.
Nunca en la historia electoral de BCS, algún partido político o candidato, había arrancado una campaña electoral por la gubernatura del estado, con presencia en los cinco municipios en un mismo día; al efecto, recorrimos 700 kilómetros para comunicarnos directamente con los ciudadanos de Mulegé; Loreto, Comondú, La Paz, y Los Cabos. Actos con rostro humano, con proximidad ciudadana, generando empatía y calidez, reconociendo que es la mejor manera de establecer un puente de unidad y compromiso con todos los pueblos, con toda la gente, a pesar de las restricciones sanitarias que, por cierto, cumplimos cabalmente. Así, mientras unos juntaron carros, nosotros reunimos personas.
No nos fuimos a presentar; nuestros recorridos por todos los rincones del estado, vienen de muy lejos; de las luchas sindicales, políticas y populares a lo largo de más de 40 años de persistencia tenaz por avanzar en la construcción de la democracia con justicia y dignidad. Con el convencimiento de que sí es posible construir un mejor destino y un porvenir con crecimiento y desarrollo para los habitantes de las comunidades de nuestra geografía sud-peninsular.
Lo anterior, sólo será posible inaugurando una nueva forma de hacer gobierno, con austeridad republicana; ahorro y racionalidad en el gasto público, combatiendo la corrupción, el despilfarro y las obras de relumbrón. Volviendo la vista hacia las necesidades más apremiantes de las comunidades del campo, de la costa y de las ciudades. Reconstruyendo el tejido social, regenerando la confianza ciudadana, desde una perspectiva ética y moral, de no mentir, no robar y no traicionar al pueblo.
Para recuperar no sólo la dinámica económica, sino también, para darle un nuevo impulso responsable a la educación, la salud, el deporte, el arte y la cultura, dejando atrás el abandono, la indiferencia y el olvido. Fortaleciendo nuestra identidad y nuestras tradiciones, colocando en el centro de nuestro interés, a la persona humana.
Y como lo hemos reiterado, un buen gobierno se construye con la participación de todos los agentes económicos y con todos los sectores sociales; un gobierno de puertas abiertas y de diálogo permanente; así se construye una verdadera gobernanza.
No más gobiernos encerrados en un búnker o en una burbuja, alejados del pueblo, de menosprecio al pueblo, y bloqueados a piedra y lodo frente a las voces ciudadanas que demandan gobiernos sensibles que sepan escuchar y atender con diligencia las demandas de la comunidad.
Sólo así, podremos impulsar planes y programas sustantivos encaminados a resolver problemas focalizados, regionales o de carácter estatal, como la defensa y preservación del agua y del medio ambiente; para enfrentar la sequía recurrente que afecta a los productores agropecuarios; el rezago de vivienda segura; de movilidad y de mejoramiento urbano; de mejoramiento de los caminos rurales; de impulso al turismo acuático, ecoturismo y turismo cultural; de apoyo a la pequeña y mediana empresa; del fortalecimiento al cooperativismo; de mantenimiento y conservación de la infraestructura educativa, deportiva y de salud; de apoyo a la pesca ribereña libre; de facilitar, con estricto apego a la ley, la inversión privada, y en lo fundamental, la seguridad pública y protección del patrimonio de los ciudadanos, entre otros aspectos que serían largos de enumerar en este espacio.
Compromiso que, desde esta columna, refrendamos con las y los sudcalifornianos para construir un gobierno de la gente y para la gente; gobernando con todos y para todos, como lo ha expresado nuestro Presidente: ¡Con el Pueblo todo, sin el pueblo, nada!
Y como lo hemos hecho siempre, en esta lucha que viene de lejos, seguiremos tendiendo la mano amiga, fraterna, comprometida, solidaria, con principios y convicciones firmes, para engrandecer a nuestro estado; porque juntos, porque unidos, seguiremos haciendo historia en Baja California Sur.