La Paz, Baja California Sur.- La agresión sufrida a Samuel Mariche Marín de 40 años, quemado vivo con gasolina mientras dormía tras unas copas en la calle Tezontle de la colonia El Progreso, en La Paz, Baja California Sur, ha dejado huella en la vida de su familia y pocas respuestas.
Cinco días después del incidente, su hermano mellizo, Manuel Mariche, brindó una actualización sobre el estado de salud de Samuel y expresó su preocupación, al señalar que no tiene ningún apoyo institucional.
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Samuel se encuentra actualmente en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) del Hospital General Juan María de Salvatierra; la familia se mostró desesperada por trasladarlo a una unidad especializada en quemaduras, conforme al diagnóstico que recibió.
Según el informe médico, compartió el familiar, presenta quemaduras en el 99% de su cuerpo, con complicaciones que han llevado su estado a una condición “crítica”, e inclusive describió la salud de su hermano como “nula” mientras sigue sedado y medicado.
“He pasado a verlo, pero desgraciadamente se me rompe el corazón de ver a mi hermano en ese estado. Duele mucho ¿verdad? Pero solo pues hay que tener fe que, pues se va a levantar, verdad porque pues lo ve muy grave”, describió Manuel de su hermano.
“Somos cuates, somos unidos, casi toda la vida él me ha seguido, aunque yo ya tengo mi familia, él no tiene esposa, no tiene hijos”, agregó sobre la víctima.
Los Mariche tienen obstáculos económicos, ya que la empresa para la que Samuel trabajaba no puede proporcionar el respaldo necesario para ampliar su seguro médico, que vence el 28 de noviembre y facilitar su atención médica especializada.
Manuel Mariche reiteró que, hasta el momento, no han recibido ningún apoyo por parte de las instituciones gubernamentales, ya sean estatales, municipales o federales.
Informó haber solicitado a la Dirección de Atención Ciudadana de La Paz, ayuda para cubrir los costos médicos acumulados, que ascienden a alrededor de 29 mil pesos. La falta de respuestas y apoyo ha sumido a la familia en una situación que describieron como angustiante.
En cuanto a la posible motivación detrás del ataque, Manuel reconoció que su hermano tenía problemas de abuso con el alcohol y las drogas, pero enfatizó que no era una persona agresiva. Pidió a las autoridades realizar investigaciones exhaustivas para determinar las circunstancias del incidente.
Hizo un llamado a las dependencias gubernamentales y a la ciudadanía en general, a que brinden su apoyo a la familia en este difícil momento. Puso a disposición para cualquier donación o apoyo su número de cuenta 012040015505727009 en el banco BBVA, a nombre de Manuel Mariche Marín.
Además, pidió a las autoridades a realizar investigaciones a fondo para esclarecer los hechos y encontrar a los responsables. La falta de información y la ausencia de detenidos, mantienen la incertidumbre en torno al caso, consideró.
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La Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE) se ha limitado a proporcionar información mínima sobre la apertura de la carpeta de investigación, comprometiéndose a divulgar detalles una vez que se obtengan resultados.
La familia Mariche, con Manuel a la cabeza, reconocieron que enfrentan una dura realidad que va más allá de una tragedia personal o familiar. Su llamado a la sociedad, fue por la solidaridad y la acción conjunta para enfrentar estos desafíos que afectan a la comunidad.
