La Paz, Baja California Sur.- Vecinos de la colonia “El Conchalito” de esta ciudad manifestaron su inconformidad por la construcción de un equipo de cárcamo de bombeo para el desalojo de aguas negras, por parte de la empresa constructora Eclíptica S.A. de C.V., responsable del desarrollo inmobiliario “Bugambilias”, ubicado a un lado de la citada colonia.
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Fernando Alvarado “El Moyeyo”, propietario de un restaurante cercano a la obra que se construye, señaló que no se vale que edifiquen un fraccionamiento y todo “el cochinero” que genere se los vayan a aventar a “El Conchalito”, con todos los problemas de salud que eso implica, comenzando con los malos olores.
Dijo que la inconformidad de los habitantes de “El Conchalito” no se ha hecho esperar, por lo que llevan alrededor de 200 firmas para promover un amparo contra la construcción del cárcamo de bombeo, que en todo caso debería asentarse en el nuevo desarrollo inmobiliario.
Comentó que un representante de la empresa constructora les explicó que la obra está dentro de su propiedad, pero “aun así, no es correcto que construyan ese cárcamo de bombeo en una zona habitacional y menos en la colonia que está a un lado”.
De acuerdo con la licencia de construcción número 0030/24 expedida por la Dirección de Obras Públicas de la Dirección General de Gestión Integral de la ciudad de La Paz, el 31 de enero de 2024, firmada por el jefe del Departamento de Permisos y Licencias de Construcción, Juan A. Tamayo Alvarado, y la directora de Obras Públicas, Yurico Yesenia Corona Yuen, se autorizó el cárcamo de bombeo para el desalojo de aguas negras, quedando la operación, funcionalidad y el mantenimiento del mismo, en manos del desarrollador.
La obra se construye en el predio con clave catastral 101-012-126-089 ubicado en el circuito Bugambilias e/acceso número 127 de la colonia Bugambilias.
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No obstante, Fernando Alvarado señaló que la obra está muy cerca de su negocio que es un restaurante de mariscos, en la colonia “El Conchalito”, lo que resulta irónico porque a él le exigen de forma estricta cumplir con la normatividad sanitaria, pero ahora le ponen un cárcamo enfrente.
Recordó que en la pasada administración municipal un exfuncionario le advirtió que le haría la vida de cuadritos, luego de que se molestó por un supuesto mal servicio, cuando comió todo lo que pidió.
A raíz de eso, manifestó que le comenzaron a llegar inspecciones y hasta le clausuraron temporalmente porque la puerta de la cocina supuestamente estaba oxidada, y aunque ese asunto quedó atrás, ahora construyen un cárcamo de bombeo de aguas negras cerca de su negocio.
