La Paz, Baja California Sur (OEM-Informex).- Mientras que a nivel nacional particularmente en los estados del norte y en destinos turísticos como Acapulco el consumo de tiburón en fresco ha crecido durante de manera importante en Baja California Sur el gusto por este alimento se ha desplomado, al grado que de 10 kilos de filete que se venden en los mercados sólo 1 corresponde a esta especie.
Pero no siempre ha sido así; hasta antes de los años ochentas, el filete de tiburón era muy apreciado entre las familias locales, debido a que este no contiene espinas, una condición que favorecía su venta especialmente para alimentar a los niños; luego, los expendedores adoptarían la práctica de despinar especies consideradas de segunda como el cochito, la pierna y otros, que terminarían sustituyendo al tiburón, aún y cuando se trata de un alimento barato y nutritivo.
Con todo y eso, la pesquería de la que dependen miles de familias de pueblos pesqueros en los litorales sudcalifornianos del Golfo de California y del Pacífico no se ha detenido; a un mes de iniciada la temporada, el saldo de la zafra ha sido bueno, aunque con algunas particularidades que la hacen distinta a la de años anteriores.
Gabriel Estrada, cooperativista y permisionario de tiburón, integrante de una familia que se dedica a esta actividad desde hace más de 70 años, informó que la captura ha ido de regular a mejor, en esta ocasión, sin los sobresaltos por la presencia de grupos conservacionistas que se oponen a esta actividad.
La temporada actual tiene la particularidad de que se concentró en las costas del Pacífico, a diferencia de años anteriores cuando se presentaba con mayor abundancia en la zona de la isla San José y en Los Frailes, en las costas de La Paz y Los Cabos; Para estas fechas, la pesquería ha mejorado en la región de San Carlos y López Mateos, aunque a una distancia mayor de hasta 30 millas de la costa, a diferencia de temporadas pasadas cuando el tiburón se metía más a la orilla, a una distancia de cinco a 10 millas.
Gabriel Estrada explicó que el alejamiento de esta especie hacia aguas más profundas sería atribuible a que las tormentas favorecen las corridas, y en esta ocasión la llegada de huracanes se ha retrasado.
Actualmente están trabajando el tiburón sedoso, el cornuda y el judío, tanto con anzuelos como con redes, ambas artes de pesca, permitidas.
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Informó que la mayor parte del tiburón se comercializa seco y es consumido casi en su totalidad durante las fiestas de diciembre y año nuevo cuando se cocina tipo bacalao; el precio se mantiene estable en 25 pesos en troncho y en la playa.
En Baja California Sur son más de 1500 los pescadores que se dedican a esta captura en la temporada que inicia el 1 de agosto y termina el 1 de mayo, con 150esfuerzos de los cuales 100 son permisionarios y 50 cooperativistas, que en promedio sacan entre 2 y 3 toneladas por cada unidad productiva.
