La Paz, Baja California Sur.- En las calles de La Paz nos encontramos con Amador Rosales Mandujano, un hábil artesano originario de Oaxaca, cuyo taller es un tesoro de productos originales, artesanales y orgánicos que representan la riqueza cultural de su tierra natal.
Amador, con dos años en La Paz, se dedica a la creación de artesanías mientras apoya a su familia en la producción de productos como café, mezcal y mole, elaborados con esmero y autenticidad.
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TRADICIÓN ANCESTRAL QUE LLEGA A LA PAZ
Su abuela, es experta en la elaboración del mole y su abuelo, tiene 83 años de experiencia en la producción de mezcal, a quienes consideró pilares fundamentales en este legado artesanal.
“Con siete diferentes chiles se fabrica el mole y usa 14 de diferentes especies. También una de las cosas más que hacen la diferencia es el cacao, que es el chocolate oaxaqueño”, agregó Rosales.
Su negocio ubicado en las calles 5 de Febrero y Topete, invita a un viaje sensorial que nos transporta directamente a las montañas de Pluma Hidalgo, Oaxaca, con su aromático café. Amador destaca la importancia de la tierra y el clima para lograr un café con sabor excepcional.
Aunque consideró que la verdadera joya de la corona es el mezcal, cuidadosamente elaborado por el abuelo de Amador en un rancho, que narró es de cuatro hectáreas en el poblado de Matatlán. Ahí la magia ocurre con la combinación de los agaves tobalá y espadín, con un proceso de envejecimiento de 12 años, que confiere al mezcal un sabor único y distintivo.
FUSIÓN CULTURAL ENTRE BAJA CALIFORNIA SUR Y OAXACA
Las artesanías que Amador crea con maestría, son desde atrapasueños tejidos con técnicas como el macramé hasta joyería con incrustaciones de conchas de abulón y caracoles locales, así como jade y ámbar. Cada pieza es una manifestación de su respeto por la naturaleza y su deseo de preservar la cultura ancestral, compartió para El Sudcaliforniano.
Adaptarse a la vida en La Paz no fue difícil para Amador, quien destacó la tolerancia y aceptación de la diversidad cultural en la ciudad.
Amador Rosales Mandujano como embajador cultural a través de sus manos, teje un puente entre Oaxaca y La Paz a través de sus obras.
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El artesano puede ser contactado a través del número 95 1109 7348 a través del servicio de mensajería WhatsApp. “Yo los atiendo ahí les puedo hacer cualquier este trabajo de artesanía y también vender cualquier producto”, añadió.
Su trabajo, destacó, es preservar la tradición de la artesanía mexicana, así como la importancia de compartir su cultura en un mundo cada vez más globalizado.