La Paz, Baja California Sur (OEM - Informex). - El 11 de julio de 1991, México presenció un fenómeno astronómico que marcó la historia en más de 20 estados de la república mexicana, donde se presenció el eclipse total de Sol, el evento se convirtió en el “espectáculo del siglo”, ciudadanos de Baja California Sur recuerdan este suceso que marcó sus vidas por lo asombroso que se vio y por los mitos que envolvía el fenómeno.
El docente Manuel Oseguera, ex catedrático de la Universidad Autónoma de Baja California Sur, fue el coordinador general del Comité Universitario para la observación del eclipse 1991, relata que este hecho histórico fue sorpréndete, se tuvo coordinación con el Instituto de Astronomía de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) para dar difusión del evento e importancia del eclipse, con el apoyo de muchas instituciones se organizó un campamento internacional, con la presencia de un gran número de científicos a nivel internacional.
Destacó que cada eclipse trae consigo un importante numero de mitos que no están comprobados científicamente pero que las personas en su mayoría los creen.
“Se dicen muchas cosas, en aquel entonces las mujeres embarazadas no podían salir porque se decía que los hijos podrían salir con malformaciones y debían ponerse un listón rojo en la panza para que no salieran con labio leporino, el comportamiento de los animales si cambió, pero esto se debe al desconcierto que se tiene por lo desconocido, muchos de ellos salieron a dormir cuando vieron que oscurecía”.
Destacó que medios de diferentes partes de México y del mundo vinieron a Baja California Sur para realizar una cobertura de lo que ocurría en esos momentos, el evento duró una hora pero su punto máximo de oscuridad fue de siete minutos y dos segundos.
A treinta años de este fenómeno, ciudadanos aún recuerdan esta fecha debido a lo sorprendente que fue y las leyendas y mitos que envolvían al eclipse total del sol.
“Estaba yo aquí en La Paz y nunca se puso negro total. No nos dejaban asomarnos a la ventana porque decían que nos íbamos a quedar ciegos. Mis papás dicen que en CDMX si se oscureció totalmente. Se puso el cielo como si fueran las 8:00 pm, sin sol”.
“Fue una experiencia muy padre, salimos al patio de casa de una tía en Fovissste y tenía un árbol de aguacate, en el piso se reflejaban las lunitas a cómo iba avanzando, estuvimos en familia, fue un día muy padre, estábamos muy emocionados, también nos prohibieron mirar al cielo porque nos íbamos a quedar ciegos, pero si usamos unos lentes especiales para verlo, hasta ahorita no me he quedado ciega”.
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“Pasó a la noche en cuestión de minutos. Profético. Como estaba en el pueblo las gallinas se subieron a los árboles a dormir, cuando regresó el día los gallos empezaron a cantar”.
“Vivía en Vizcaíno, había muchos mitos entorno a este fenómeno, desde que si lo mirabas directamente la gente podría quedar ciega, las mujeres embarazadas debían permanecer en casa porque si salían podrían perder el feto. A las plantas se les colocaban listones rojos para que no se secaran. Si lo apuntabas con el dedo, te salían mezquinos, son algunos de los mitos que circulaban en aquel entonces. No sé si exista evidencia científica de todo esto. En aquel año suspendieron todo, no escuelas, la gente no fue a trabajar, todos debían permanecer resguardados”.
A tres décadas de uno de los fenómenos más importantes ocurridos en Baja California Sur, sudcalifornianos comentan lo sucedido a las generaciones nuevas ya que en sus memorias continua aun la imagen fresca de un día que tuvo unos minutos de noche, con un clima helado, sin duda alguna, este fenómeno tuvo el asombro y el miedo de un gran número de personas.
