La Paz, Baja California Sur.- En pleno 2024 y a seis años de vigencia en Baja California Sur, para las autoridades es como si nunca hubiera existido una “Ley Desplastifícate”.
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Esto reconoció Mario Sánchez Castro, director regional del Centro Mexicano de Derecho Ambiental (Cemda) y miembro de la Alianza “Desplastifícate”, con más de 35 organizaciones de la sociedad civil.
Esta reforma a la Ley de Equilibrio Ecológico y Protección al Ambiente de Baja California Sur fue promulgada en julio de 2018 y su objetivo es restringir la venta, fabricación y distribución de bolsas plásticas, envases de unicel y popotes en el estado.
FALTA DE VOLUNTAD DEL GOBIERNO Y MUNICIPIOS
Abordó los desafíos y avances de la ley, a punto de cumplir su sexto aniversario en Baja California Sur. La iniciativa se remonta a 2017, aunque sus primeros trabajos fueron en el año 2016.
Tras aprobarse por el Congreso del Estado y publicarse en 2018, durante su implementación enfrenta desafíos por “la falta de voluntad” de las autoridades estatales y municipales para aplicarla, comentó Sánchez.
A pesar de que la ley establece plazos límite para la transición hacia materiales biocomposteables, un año para negocios de comida (2019) y dos años para proveedores de envases (2020), no se cumplieron.
Consideró un retroceso que, en eventos públicos, como el informe de gobierno de la presidenta municipal de La Paz, Milena Quiroga, se haya vuelto al uso de botellas plásticas con agua.
También el Congreso de Baja California Sur, que había detenido el consumo de desechables para bebidas y alimentos, regresó a estos materiales.
Los productos biodegradables, son fabricados con sustancias de origen natural, pero también sustancias sintéticas. Se degradan gracias a sus componentes químicos al contacto con el medio ambiente.
Los productos biocomposteables, son fabricados totalmente con sustancias de origen natural. Se convierten en composta a través de la acción del ser humano, tardando menos tiempo en descomponerse que las sustancias biodegradables.
DEBACLE Y REGRESO AL PLÁSTICO POR COVID-19
La pandemia de Covid-19 representó una debacle en los esfuerzos de cumplimiento de la ley, ya que la Comisión Estatal para la Prevención contra Riesgos Sanitarios (Coepris) no dieron prioridad a las disposiciones de la “Ley Desplastifícate”, aseguró el director regional.
Esto generó confusión y disminuyó el interés y la voluntad tanto de los comerciantes como de los consumidores, relató.
“Se dejó ver de las autoridades, que era necesario tener una pausa en la reforma, en diferentes pláticas que venían en diferentes direcciones, de la autoridad […] se ha dejado de reforzar ese ese músculo de la ley desplastifícate, las autoridades ahorita no lo tienen como una prioridad”, expuso.
Aunque consideró importante la separación de basura y disminuir los residuos como agenda del Ayuntamiento de La Paz, recalcó que también deben hacer cumplir las disposiciones para cambiar a materiales biocomposteables.
NUNCA LLEGARON REGLAMENTOS MUNICIPALES
No se han logrado las reformas a los reglamentos municipales de La Paz, Loreto, Los Cabos, Mulegé ni Comondú.
A partir de esta ley, se logró crear la norma NTE-001-SETUES-2018, “Para la restricción de la venta y obsequio de bolsas plásticas, popotes y contenedores de poliestireno expandido de un solo uso”, en vigor desde el 21 de febrero de 2020.
Posteriormente, correspondía a cada cabildo armonizar sus reglamentos con esta norma estatal, lo que ha tenido resistencias y no se ha logrado. Aquí sigue estancada la ley.
“No han avanzado tampoco en este tema. Si para la ciudad capital ha sido relegado en la agenda de asuntos trascendentes, eso se ha repetido en los otros municipios”, añadió Sánchez Castro.
NO SE DESPLASTIFICÓ EL CARNAVAL LA PAZ
Durante el carnaval de La Paz de 2024, se registraron 57 toneladas de residuos. Se otorgaron permisos a los comercios sin asegurarse de no entregaran envases desechables o de un solo uso durante el evento, recalcó Mario Sánchez. No hubo apertura para “desplastifícate”.
El problema es más grave, al conocer el destino final de estos desechos en eventos como huracanes, cuando los residuos terminan dispersos por las calles y áreas sin una adecuada recepción, llegando incluso al mar.
El fenómeno ha sido documentado en imágenes y videos, lo que consideró, pone en evidencia el impacto devastador de la contaminación plástica en el medio ambiente marino y la vida silvestre.
Hizo un llamado urgente a las autoridades para que implementen la reforma y prohíban estos productos en el carnaval. Esto incluye inspección, vigilancia y fomento del cambio hacia alternativas más sostenibles por parte de los comercios y consumidores.
SE PUEDE AJUSTAR
Sánchez aseguró que la alianza "Desplastifícate" continúa abogando, seis años después, por la implementación efectiva de la ley.
Reconoció que no se tiene planeada alguna modificación, se han identificado áreas donde se pueden realizar ajustes y mejoras para garantizar que realmente funcione.
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El fondo de la ley "Desplastifícate" es reducir los residuos sólidos en el estado, promoviendo prácticas más sostenibles y respetuosas con el ambiente. Una cultura de consumo responsable que reduzca la dependencia de productos de un solo uso, añadió.
Con la cantidad diaria de 400 y 450 toneladas de basura recolectada tan solo en La Paz, consideró urgente tomar medidas para proteger el ecosistema privilegiado de Baja California Sur.
