La mayoría de los paceños esperan gustosamente la Semana Santa para visitar las hermosas playas de la región así como degustar los platillos de la temporada de Cuaresma, principalmente la tradicional capirotada que en esta época es común encontrarla en algunos establecimientos o personas que la colocan a la venta.
En la localidad se prepara de manera muy similar a la del resto del país; la preparación sudcaliforniana está basada al horno principalmente. Los ingredientes preferidos por las abuelitas y madres de familia son pan blanco dorado con mantequilla, queso semiduro, almendras, ciruelas negras, pasas, cacahuates, canela en polvo, plátano macho, algunos orejones de durazno y manzana.
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De acuerdo a datos arrojados por el libro "El Gran Libro de la Cocina Mexicana” fue con las primeras visitas de Hernán Cortés como la capirotada se fue introduciendo a México.
Sin dejar que ésta perdiera su simbolismo religioso le dieron a cada ingrediente su significado muy cercano a la procesión que vivió Jesucristo representado como su cuerpo; el pan, la miel, la sangre derramada y los clavos por la tortura de los clavos en sus extremidades.
A través del tiempo fue adquiriendo su toque personal y distinto desapareciendo la carne posiblemente por alguna escasez vivida en ese entonces y se le dio paso a la introducción de otros ingredientes de carácter más dulce.
