La Paz, Baja California Sur (OEM-Informex).- Una gigantesca varazón de sardinas en aproximadamente 4 kilómetros de litoral se registró frente a la comunidad El Cardón en Laguna San Ignacio municipio de Mulegé; se trata del segundo evento de este tipo en los últimos meses, el anterior fue de almeja, por causas que a la fecha no se han dado a conocer por parte de las autoridades ambientales o de pesca, aunque fuentes de El Sudcaliforniano, los relacionan con la presencia de corrientes de agua muy caliente proveniente del norte.
Las sardinas se vararon muertas frente al campo pesquero El Cardón, atrayendo a miles de gaviotas que llegaban para consumir el producto aun fresco, y según pescadores de la comunidad aún no ha llegado personal de ninguna institución para tomar muestras y realizar los análisis correspondientes a fin de dar con las causas que provocaron este fenómeno.
Aunque es muy difícil calcular el peso de la sardina varada, algunos lugareños entrevistados por este medio estiman que son más de mil toneladas, debido a que son aproximadamente 4 kilómetros de litoral donde hay producto varado., y cada metro cúbico representa mil kilos.
Es la primera ocasión en que se registra un evento de este tipo frente al pueblo, muy cerca de las casas; las anteriores varazones habían sido a varios kilómetros de la comunidad, por lo que los vecinos están pidiendo el apoyo de las autoridades para evitar que se convierta en un problema de salud pública.
En ese sitio se explotan diversas especies de escama así como langosta y diversos tipos de bivalvos; se ubica a unos 60 kilómetros al sur de la comunidad de San Ignacio, en el Area Natural Protegida de la Reserva de la Biosfera de Vizcaíno, en aguas de la Laguna San Ignacio, mundialmente famosa por ser uno de los principales santuarios de la ballena gris.
Un evento similar se registró el pasado mes de julio entre los campos pesqueros Malarrimo y El Campito, al norte de Bahía Tortugas; en esa ocasión, también fueron miles de toneladas de sardina y en menor medida de langosta, verdillo, anchoveta, guitarra, cazón, cabrilla y otras especies de escama, que fueron echadas por el mar hasta la playa.
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Este evento había sido consecuencia de la entrada de una célula de agua muy caliente que afectó desde El Rosario, al sur de Camalú en el vecino estado de Baja California, hasta las islas de Cedros y Natividad y desde las costas de Punta Eugenia, hasta Bahía Tortugas y la laguna Ojo de Liebre.
Semanas antes, un fenómeno similar se registró en costas de Canadá, dejando millones de mejillones muertos, literalmente cocinados por el agua caliente.
Las temperaturas normales en el agua del mar en esas latitudes es de entre 18 y 22 grados y durante las varazones, habría llegado a los 30.
