La Paz, Baja California Sur (OEM-Informex).- La pandemia sanitaria derivada por el virus del Covid-19 que invade al país y, sobre todo a Baja California Sur, ha afectado la economía de los hogares, restaurantes y negocios de comida, por lo que, las personas en situación de calle se han visto afectadas debido a que los restaurantes y negocios de comida no están generando la misma cantidad de desechos que se generaban antes de esta pandemia, hoy en día las ventas en restaurantes son escasas y hasta el mes de julio se había presentado el cierre de al menos 52 restaurantes en el estado; esto genera que las personas en situación de calle o pepenadores luchen más para conseguir sus alimentos, lo que para muchos es basura.
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Un poco de alimento
Las personas en situación de calle, son una parte de la población vulnerable a los estragos que trae consigo la pandemia sanitaria por Covid-19, ya que no pueden vivir está pandemia bajo un techo, con comida en una mesa, lavando sus manos o utilizando cubrebocas, su única prioridad es conseguir un poco de alimento sin importar si este se encuentra en un contenedor de basura.
Con ropa sucia y sin zapatos, rondan las calles de la ciudad cientos de personas en situación de calle, las cuales lamentablemente no viven está pandemia sanitaria con medidas de higiene y cuidando su salud, bajo las recomendaciones que las autoridades han establecido, incluso algunos no están enterados de que es el Covid-19, porque, no tienen acceso ni facilidad para tener la información de primera mano, lo único que les preocupa es conseguir agua para beber y un poco de alimento.
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Este lado de la vida es una realidad que afecta a decenas de personas en la ciudad, la necesidad y el hambre es lo primero que piensan al despertar y lo último que tienen en la mente al dormir, los restaurantes ya no generan la basura que generaban antes de la pandemia, los platos de desechos con aproximadamente el 30 por ciento de comida por el momento ya no son una opción para estás personas debido a que ya no aparecen en los contenedores, resultado de las bajas ventas.
Debido a esta crisis, los pepenadores de basura migran a otros lados de la ciudad a buscar alimento, revisando la basura con la esperanza de encontrar algo de comer o de beber, hoy en día es más común topar a personas revisando los contenedores y cestos de basura colocados frente a los domicilios, ya que la basura de los restaurantes ya no es una opción para las personas que tienen hambre.
El cierre de empresas, el recorte de personal y la disminución de sueldos han sido los factores más importantes que han generado un gran golpe a la crisis económica.
La Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) estimó que la pobreza en México incrementará en 7.6 por ciento en este año al pasar de 41.9 millones de personas en 2019 a 49.5 millones de personas en 2020, mientras que la pobreza extrema crecerá 6.3 por ciento, al crecer de 11.6 millones a 17.4 millones y esto va a estar relacionado con la pérdida del empleo y, debido a que en medio de esta pandemia las familias han incrementado su gasto en salud y los datos muestran que 95 millones de personas invierten en gasto catastrófico y de ellos 12 millones están en riesgo de empobrecer.
La población en situación de calle no se está considerando como personas, como ciudadanos del mismo nivel o la misma equivalencia humana que otras y otros, que si tienen una casa, que tienen un trabajo o una condición económica protegida, la población en situación de calle se encuentra altamente vulnerable a contraer el Covid-19, pues carecen de información sobre el tipo de cuidados que deben tener.
Con ropa sucia y sin zapatos, rondan las calles de la ciudad cientos de personas en situación de calle, las cuales lamentablemente no viven está pandemia sanitaria con medidas de higiene y cuidando su salud, bajo las recomendaciones que las autoridades han establecido
Cabe referir que, en la capital del estado existe el albergue Mamá Benita, el cual ha abierto sus puertas a un sinnúmero de mujeres en situación de violencia con sus hijos, personas con discapacidad o en situación de calle, etc., consolidando el Centro de Apoyo o Albergue “Mamá Benita”, en el cual, a raíz del Covid-19, han tomado medidas drásticas de salud, sin embargo muchas veces no es suficiente, las personas que viven en el albergue permanecer como colaboradores del mismo en gratitud, pero nadie está a la fuerza, es un albergue de puertas abiertas, es un escalón en la vida de alguien o un proyecto de vida para otros, donde se alimentan, sobreviven, conviven, aprenden y trascienden.
Algunas personas en situación de calle al no encontrar alimento en los contenedores de basura donde normalmente era más fácil que hoy conseguirlo, pasan hambre y sed en las calles de la ciudad, la cual atraviesa por una larga pandemia sanitaria, la cual ha dejado crisis económica y ha cobrado la vida de cientos de sudcalifornianos.
