La Paz, Baja California Sur.- Compartir contenido íntimo sin el consentimiento de la persona involucrada, es un delito; gracias a la Ley Olimpia, conjunto de reformas legislativas que contribuyen a combatir esta problemática.
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No obstante, la violencia digital no ha sido erradicada en su totalidad. Christa González Robbinson, perteneciente a la organización “Defensoras Digitales BCS”, detalló que, en lo que va del 2024, más de 10 personas han buscado acompañamiento por violencia digital; todas han sido mujeres.
“Del 01 de enero al 28 de febrero hemos atendido alrededor de 15 solicitudes de asesoría o apoyo o acompañamiento. Eso sin contar la cantidad de preguntas que respondemos casualmente, sin contar como asesoría en forma. Principalmente de La Paz y Los Cabos, pero también de Puebla, Estado de México, Baja California e incluso de otros países como Honduras o Perú”, aseveró.
González Robbinson explicó que algunas de estas solicitudes se realizan en forma grupal. Es decir, no se atiende a una sino a varias en una misma consulta; ya sea porque tienen el mismo agresor o aparecen en la misma página de internet.
ELIMINAR CONTENIDO ÍNTIMO EN LOS ENTORNOS DIGITALES ES POSIBLE
Hace unas semanas, en México, se dio a conocer una iniciativa la cual consiste en la posibilidad de eliminar contenido íntimo sin el consentimiento de la persona involucrada en redes sociales y plataformas digitales.
González Robbinson explicó que esta iniciativa forma parte de un programa más grande, que se llama “Línea de Ayuda para la pornovenganza”.
Esta línea de ayuda nace de otra organización internacional, basada en Reino Unido; tiene por nombre SWGfL. Trabaja hace casi 10 años por un internet más seguro. Ello es un reflejo de la normatividad específica de las tecnologías y plataformas digitales, no solamente a nivel local, sino global.
González Robbinson expresa que es una alternativa alentadora para el futuro de las niñas, jóvenes y mujeres, principalmente, tras ser las personas más afectadas por motivos que giran en torno a las violencias de género.
“En definitiva, es una herramienta muy útil; es una gran alternativa porque muchas mujeres que hemos o que han vivido violencia digital, lo único o lo primero que quiere es que esas fotos se eliminen”, dijo.
Ahora bien; a pesar de la utilización de “pornovenganza” como una alternativa de ayuda, el término cae en la revictimización, señala González Robbinson.
"Como paréntesis, quisiera mencionar que utilizar la palabra “pornovenganza” es un término revictimizante. Porque las víctimas de difusión de contenido íntimo sin consentimiento no han hecho absolutamente nada como para vengarse de ellas”, comentó.
PASOS PARA QUITAR CONTENIDO ÍNTIMO EN INTERNET
Los pasos que se indican a continuación, aplica exclusivamente para mayores de edad; las situaciones de esta índole en menores de edad corresponden a otro tipo de delitos y herramientas, lo que implica otro procedimiento a seguir.
Dicho esto, como primer paso, la persona víctima de difusión de contenido íntimo, o que esté siendo amenazada o extorsionada con publicar sus imágenes y videos, deberá entrar esta página a la página.
En ella, colaboran diversas plataformas digitales, así como empresas y conglomerados de tecnologías y redes sociales; incluyendo Meta, Threads, Pornhub, entre otros.
Posteriormente, de acuerdo con González Robbinson, se realizan algunas acciones específicas dentro de la página web en cuestión para así lograr la total eliminación.
"Tú entras como mayor de edad, tú cargas las imágenes con las que estás siendo violentada o las que se difundieron, o con las que te están amenazando; y la página crea una huella. Es como una huella digital o un código de barras que es único para esas imágenes o videos que tú subas".
"Esta huella se almacena en un banco de datos, y se comparte con las plataformas, con las que trabaja la iniciativa. Tales imágenes, muy importante mencionar, nadie las ve ni se almacenan en la plataforma, solo les genera como esta huellita que es como un código de barras o una huella digital”, explicó.
Si en una plataforma digital con las que colabora la organización, se detecta que alguien intenta subir o que ya subió una imagen que tiene la misma huella, la página elimina o, dependiendo del caso, revisa si viola las normas comunitarias para tomar las medidas correspondientes.
Ante todo, las pruebas son necesarias para poder realizar una denuncia formal y lograr una justicia legal.
Sin embargo, todavía existen muchos desafíos en torno a esta problemática; debemos ir avanzando y resignificando los estereotipos de género, pilares importantes en la generación y perpetuación de violencias, expresó la integrante de “Defensoras Digitales BCS”.
“Queremos que se haga justicia, que las personas agresoras tengan consecuencias; que las autoridades protejan y hagan valer nuestros derechos. Que hagan valer los códigos legislativos que existen, que las plataformas digitales y operadores de internet pongan de su parte. Porque son una gran parte del problema, porque ellos no eliminan esos contenidos”, indicó.
EL ALGORITMO ES PATRIARCAL
"Cuando hablamos de algoritmos patriarcales, nos referimos a todas esas condiciones que suceden en internet. El algoritmo es esta serie de pasos que permiten ejecutar todas las acciones que hacemos en internet. Entonces, hay condiciones que permiten, pero además refuerzan esta idea de cosificar a las mujeres, de irnos sometiendo a ciertos estereotipos de género".
Así fue como González Robbinson expresó las razones por las cuales el algoritmo se construye y diseña desde las lógicas adscritas a un sistema machista y patriarcal.
Con ello, es posible reflexionar cómo los entornos digitales también se rigen bajo el machismo y un sistema de dominación que oprime a quienes deciden no seguir una lógica heteronormativa.
“Por ejemplo, las asistentes virtuales. Casi todos, o la mayoría, son un estereotipo femenino. Porque las mujeres solemos ser las que servimos, ayudamos y "cuidamos". O las empresas de robótica que hipersexualizan”, detalló González Robbinson.
CONTENCIÓN EMOCIONAL AUNADO A LA JUSTICIA LEGAL
La violencia digital, sin importar su tipo, provoca heridas en las víctimas. Impacta en muchísimos ámbitos de la vida.
Por ello, existe la contención emocional, y es sumamente recomendable la orientación por parte de profesionales de la salud.
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Existen instituciones feministas que también asesoran y brindan contención emocional, digital y jurídica; para dar inicio a un proceso legal.
Además, es importante entender que no es tu culpa, no debemos dejar que nuestras vidas se vean totalmente afectadas por estas circunstancias.
Que difundan imágenes íntimas, no nos hace menos y no es tu culpa. Mereces sentirte valorada siempre, y ser reconocida no solamente como un cuerpo de consumo.
