La Paz, Baja California Sur, (OEM-Informex).- El síndrome del niño sacudido es una lesión cerebral que ocurre cuando alguien golpea a un pequeño. Esta es una forma de maltrato infantil y puede pasarles a niños de hasta 5 años de edad, es más frecuente en bebés menores de 2 años. El médico pediatra Waldo Antonio Collins Cota destacó que los niños pequeños corren un alto riesgo de lesión cerebral cuando los sacuden o los arrojan, en ocasiones no hay señal de lesión evidente, pero puede causar graves problemas a largo plazo o incluso la muerte.
“Este síndrome es una variante del abuso infantil, se refiere a esa situación en la cual generalmente el cuidador que está a cargo del niño tiende a sacudir de una manera muy enérgica, muy fuerte con movimientos bruscos de la cabeza, generalmente tomándolo del tórax, a veces del cuello y en un movimiento de vaivén la cabeza tiende sufrir un movimiento que puede lastimar a los órganos adyacentes, principalmente la cabeza y las estructuras que hay dentro que es el cerebro, son los casos que más se presentan, problemas en el cerebro”.
“La cuestión de los ojitos, las estructuras oculares y a nivel músculo esquelético porque generalmente donde lo toman generan mucha presión sobre sobre el tórax y generalmente fracturan costillas, también pueden generar un problema en la región cervical, las estructuras de las cervicales y se genera un importante daño donde los niños que sufren de eso llegan a morir hasta una tercera parte de los que lo presentan tienen una muy alta mortalidad, afortunadamente no es una incidencia muy alta, también pueden quedar con secuelas”.
Destacó que el 99% de los casos que se presentan en menores con este síndrome, se debe a violencia que se ejerce por parte de familiares o cuidadores, son pocos los casos que se presentan por jugueteos en familia, aunque es importante tener cuidado con menores, sobre todo durante los primeros cinco años, pequeños se ven afectados cuando se ejerce una gran presión en su cuerpo.
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“Este padecimiento lo sufren generalmente los menores de 5 años y casi es exclusivo de los menores de 2 años, la conducta del niño es muy inmadura, lloran por cualquier cosa, generalmente el cuidador no tiene la capacidad o la integridad emocional para cuidarles y en ocasiones tienden a actuar con violencia en la desesperación, no es lo mismo zarandear a una persona de 15 años que a un niño de 2 o 3, y le puede ocasionar un mal muy grande al menor”.
Finalmente hizo un llamado a padres y madres de familia para estar atentos al cuidado de sus hijos, es importante conocer a las personas con quienes se quedarán al cuidado menores para evitar ponerles en peligro.
