Los Cabos, Baja California Sur (OEM-Informex).- Carlos Villalobos Martínez, encargado del programa de la protección de la tortuga marina del Grupo Pueblo Bonito dio a conocer que septiembre el mes con el número más alto en eclosiones, llegando a liberar al mismo tiempo crías de tortugas de hasta 60 nidos.
Compartió que la temporada de desoves de tortugas golfina inició en junio, naciendo las primeras crías en julio y a partir de ese mes todos los días están liberando crías de tortugas, esperando que siga así hasta diciembre como cada año.
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Dijo que septiembre es el mes con el pico más alto de la temporada, ejemplificando que el lunes 18 de septiembre estuvieron trabajando a marchas forzadas, pues tuvieron alrededor de 60 nidos emergiendo al mismo tiempo y 40 nidos para recolectar en la playa y llevarlos al vivero.
Explicó que por cada nido de tortuga golfina son alrededor de 80 a 173 huevos, pero por lo general es de 100 a 140 huevos.
Sobre esta temporada dijo que se ha caracterizado porque el clima, particularmente la temperatura excesiva los ha afectado y la falta de lluvia ha generado mortandad de crías.
“Ha afectado mucho la temperatura en la playa y eso nos ha generado mortandad de crías y aumentado el trabajo porque hemos tenido que colocar sombras a los nidos para que el sol no caliente demasiado la arena y se mueran las crías por dentro”, dijo. Carlos Villalobos.
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A pesar de las adversidades del clima actualmente se tienen protegidos alrededor de 1,300 nidos en lo que va de la temporada.
El trabajo dijo es patrullar la playa toda la noche, la cual es de ocho kilómetros de largo del lado del océano pacífico, iniciando del desarrollo Pedregal al monumento Faro Viejo y por el lado del desarrollo Diamante hasta la altura de la planta desalinizadora, esto en Cabo San Lucas.
Los nidos no se pueden quedar donde los deja la tortuga por el factor humano, pues hay quienes se los roban o los aplastan con vehículos, ante ello es necesario reubicarlos. Su trabajo es patrullar la playa toda la noche, recolectarlos y protegerlos en el vivero.
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Actualmente son tres las personas que están a cargo. Un trabajo demandante confirmó Villalobos Martínez en el que ha tenido que quedarse en el área laboral hasta 5 días sin ir a su casa “la persona que tiene que venir a trabajar aquí le tiene que gustar y estar enamorada de la vida silvestre sino no funciona”.
“Es una satisfacción porque invierte uno bastante y al final, cuando uno ve las tortuguitas irse al mar dice uno valió la pena el esfuerzo”, dijo al concluir el encargado del programa de la protección de la tortuga marina del Grupo Pueblo Bonito, quien ha trabajado por 20 años en su empresa y siempre a favor de la vida silvestre, y quien ha sido reconocido por su labor por Profepa, Semarnat y el mismo gobierno municipal.
