Loreto, Baja California Sur, (OEM-Informex).- La Isla del Carmen en el municipio de Loreto, fue el escenario de la conmemoración de un año más de la Virgen del Carmen, este domingo 16 de julio, a donde se trasladaron cientos de ciudadanos fieles a sus tradiciones.
La celebración data de hace muchos años cuando en esta isla una de las cinco que se encuentran ubicadas en el Parque Nacional Bahía de Loreto, contaba con un asentamiento humano dedicado a la producción de sal.
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En este sitio actualmente unas cuatro personas son las que se encargan del cuidado y vigilancia del lugar, pero en este día en especial este pequeño pueblo cobra vida con las actividades religiosas que se celebran de manera coordinada con la parroquia de Loreto.
Las actividades dieron inicio el pasado domingo con la celebración de la misa de despedida a las 7:00 horas en la Misión de Nuestra Señora de Loreto, para posteriormente recorrer algunas de las calles del Pueblo Mágico hasta las instalaciones de la dársena del puerto.
Desde ese punto la imagen de la Virgen del Carmen, a bordo de una embarcación y acompañada por un importante número de lanchas y botes, recorrió la bahía para arribar alrededor de las diez de la mañana a la ensenada de la salina, donde se encuentran ubicadas las antiguas casas y la capilla edificada en su honor, donde permanece durante todo el año.
Ya en el sitio trabajadores del mar y sus familias, así como devotos de la Virgen del Carmen participaron en una procesión para finalizar en la pequeña capilla, donde el párroco de la Misión de Nuestra Señora de Loreto, ofició la misa por este día.
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El encargado del lugar, Gaspar Bautista Figueroa, comentó que este año el número de familias que participaron en la celebración aumentó considerablemente, reuniendo alrededor de tres centenares de personas quienes se han sumado a estas actividades manteniendo vivas las tradiciones de Loreto y su tierra.
Concluidas las actividades religiosas, los asistentes disfrutaron de una visita a la zona del antiguo pueblo de la salina, que para muchos de los presentes fueron momentos llenos de recuerdos y días felices que vivieron en este sitio al ser parte de las últimas familias que habitaron la Isla del Carmen.
