Loreto, Baja California Sur.- El gobernador Carlos Mendoza Davis, acompañado por la alcaldesa de Loreto, Arely Arce Peralta, inauguraron una celda en el relleno sanitario municipal, con lo que se da solución a un problema ambiental y de salud pública, “con esta obra se mejorará en gran medida el manejo y disposición de la basura, lo que repercute positivamente en el medio ambiente y en la prevención de enfermedades virales”, puntualizó.
Mendoza Davis mencionó que para concluir la obra se ejercieron 7.2 millones de pesos con lo que se da respuesta a una sentida demanda de la comunidad, ya que anteriormente no se contaba con un vertedero adecuado para la disposición de la basura. Asimismo, mencionó que son más de 16 mil habitantes del municipio los que se benefician con esta acción.
“A partir de hoy en la primera capital de las Californias será más eficiente el servicio de recolección y disposición final de la basura, pues con la construcción y habilitación de esta celda, nos apegamos a las normas sobre tratamiento de residuos sólidos que establece la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (SEMARNAT), al incluir un sistema que impide la filtración de líquidos contaminantes a la tierra”, precisó.
Mendoza Davis mencionó que con ello se disminuye la posibilidad de incendios que se registraban en el relleno y que causaban perjuicios en la salud de los habitantes, así como impactos severos en el medio ambiente. De igual forma, hizo énfasis que con estos trabajos se resuelve también el problema que se presentaba en temporada de lluvias, ya que el agua arrastraba los desechos a las zonas adyacentes y una buena parte de los mismos terminaban en la bahía.
“Con la entrega de esta obra, refrendamos que el trabajo entre niveles de gobierno rinde buenos resultados; por ello, continuaremos por este camino, avanzando hacia ese mejor futuro que la población merece, con más y mejores obras de infraestructura que impulsen y fortalezcan las condiciones de vida de las familias que habitan en este destino turístico”, agregó.
La celda tendrá una vida útil de 8 años, misma que tiene un área de almacenamiento de 8 mil 500 metros cuadrados. La preparación del sitio comenzó con la excavación, nivelado y compactación de la superficie, la colocación de revestimientos; con una base de grava, seguido por capas impermeables de plástico (geomembrana textil) con tuberías para atrapar y llevar a los materiales que se filtran desde el vertedero; incluidos los líquidos y gases.
