La Paz, Baja California Sur.- Sólo 9 trabajadores han presentado quejas en contra de sus empleadores por considerar que las utilidades que les entregaron no corresponden a los ingresos de la empresa; todos los casos se registraron en el municipio de Los Cabos y en su totalidad la autoridad laboral les concedió la razón, por lo que en la actualidad se está trabajando en las conciliación con los patrones a fin de que se haga efectivo el pago que corresponde, informó Gustavo Hernández Vela Kakogui, secretario del trabajo y Desarrollo Social.
Aunque los trabajadores tienen un año de plazo posterior al 30 de mayo para hacer reclamaciones sobre el PTU, consideró que este número de quejas son pocas y esto es resultado de que los patrones están actuando con responsabilidad.
Con respecto al programa de Jóvenes Construyendo el Futuro que opera el Gobierno Federal y que en el caso de Baja California Sur no obtuvo los resultados esperados como sí sucedió en Chiapas, Oaxaca, Guerrero y otras entidades del sureste, el funcionario consideró que a nivel local existe una amplia oferta de trabajo y también de emprendimiento, de tal manera que resulta más atractivo acceder a un empleo formal o iniciar un negocio propio que recibir los 3,600 pesos mensuales que entrega este programa.
Recordó que Baja California Sur es de las entidades que registra mayor crecimiento económico y más empleos, condiciones que hacen de este estado el de más alta recepción de migrantes: tan solo para el ciclo escolar que está por iniciar se estima la llegada de 18 mil nuevos estudiantes a las aulas, de jóvenes y niños cuyas familias están llegando en busca de mejores condiciones de vida.
Por otra parte, y en relación a la interrupción de labores en las empresas durante el paso de huracanes, explicó que aún y cuando esta decisión no es responsabilidad de los patrones tampoco lo es de los trabajadores, de tal manera que la empresa debe pagar el sueldo a sus empleados, algo que se ha venido logrando en temporadas anteriores vía la conciliación entre las partes.
El cierre debe ser justificado cuando se ponga en riesgo la integridad de empleados o patrones, de otra manera no hay motivo para interrumpir labores, y su caso se podría infraccionar a la empresa, concluyó.