México no cuenta con un registro de los niños, niñas y adolescentes que ingresan solos al país por la frontera sur en su intento de llegar a Estados Unidos. A pesar de la emergencia y de la crisis que hay en la frontera sur por la llegada masiva de migrantes, el Gobierno no ha tenido capacidad de generar un registro de tráfico en este sector vulnerable.
En entrevista con El Sol de México, Martín Pérez García, director ejecutivo dela Red por los Derechos de la Infancia en México (Redim) y Mario Luis Fuentes, integrante del Consejo Consultivo de Sistema Nacional de Protección de Niñas, Niños y Adolescentes (Sipinna) coincidieron en la necesidad de que México establezca un registro formal y se sepa número menores, edades y nacionalidades, y urgir que se les garanticen sus derechos.
Pérez García de Redim indicó que los únicos datos que se tienen de niñas, niños y adolescentes que viajan solo por México hacia la frontera norte son por parte del Departamento de Seguridad de EU, porque en el Instituto Nacional de Migración(INM) no cuenta con esa capacidad.
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Los datos que se tienen por parte de la Patrulla Fronteriza es que fueron 20 mil 916 menores de edad no acompañados los que fueron detenidos en la frontera México - EU entre enero y marzo de este año provenientes de Centroamérica.
De esta cifra, la Patrulla Fronteriza abundó que tres mil 595 niños y adolescentes fueron detenidos tan sólo entre Sonora y Arizona, que han sido llevados a centros de detención en Yuma y Tucson.
Según estos datos, los menores son originarios de Guatemala, Honduras y El Salvador, por lo que forzosamente pasaron por territorio mexicano para llegar hasta la frontera norte.
Mario Luis Fuentes, integrante del Consejero Consultivo de Sipinna, dejó claro que esta situación es una de las demandas morales y éticas del país más exigentes. “Esta es una realidad. Hay una enorme cantidad de niñas, niños y adolescentes que transitan a EU es un proceso creciente y nuevamente el Gobierno y las instituciones están desbordadas”.
Fuentes acotó en la charla con la Organización Editorial Mexicana (OEM), que al día de hoy los albergues no están estructurados ni para el volumen, ni para la vulnerabilidad de los niños. “Lo que se debe es reconocer la magnitud de lo que está pasando y construir, no sólo las infraestructuras, sino destinar un número de profesionistas, psicólogos, trabajadores sociales, personas de atención primaria de salud, para fortalecer”, explicó.
Enfatizó que la realidad de los niños, niñas y adolescentes migrantes provenientes de Centroamérica, debe atenderse y construirse con acción de emergencia social urgente, debido a que los albergues están desbordados y no tienen capacidades físicas y humanas, por ello dijo que “México está obligado a proteger a los niños y adolescentes a darles asilo o res-guardo en lo que se define su condición”.
MÉXICO OBLIGADO A DAR ASILO A NIÑOS
Martín Pérez García, director ejecutivo dela Red por los Derechos de la Infancia en México (Redim) aseveró que “es muy tris-te que (...) tengamos ahora un Presidente dócil, un presidente temeroso y que la política migratoria la está decidiendo Trump y su gobierno y no la política exterior mexicana y acuerdos internacionales”.
Comentó que se han visto las acciones que se han llevado a cabo en las redadas en contra de mujeres y niños, por lo que Pérez García consideró que “es ofensiva en sí misma y violenta todos los derechos y tratados internacionales porque estamos hablando de poblaciones que están huyendo de la violencia y que están buscando refugio”.
Pérez García subrayó que hasta el día de hoy “no se ha hecho un registro de niños que estén ingresando, pero hay cifras del Departamento de Estado de EU que da cuenta, por ejemplo, que de todos los detenidos los deportados son el 86%, pero hasta ahora en el caso mexicano no hay datos que estén disponibles o que sean públicas”.
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