La Paz, Baja California Sur. (OEM-Informex).- Ante la necesidad de poder trabajar con la pandemia, el señor Don Cándido Hernández Garibaldo, ha estado vendiendo carne regional, carnitas, chicharrones, carne fresca y verdura regional. Así mismo, expresó que la colonia El Centenario tiene que buscar su propio desarrollo, y una forma de vender otros productos.
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“Estoy vendiendo carne regional, carnitas, chicharrones, carne fresca, y verdura regional en la carnicería 9 de mayo, empecé en noviembre del año pasado, pero poco a poco va resultando, porque no podemos quedarnos sin actividad en nada, necesitamos buscar un centavito para sobrevivir”.
La venta que ha tenido en el Centenario ha sido un tanto difícil, pero si se vende su producto, debido a que mucha gente esta acostumbrada a ir a La Paz a las grandes tiendas y supermercados pensando que todo es mas barato. Las carnitas hacen 10 kilos, máximo 15 kilos para su venta, la vende a $150 pesos por kilo.
“Este pueblo tiene que buscar su propio desarrollo, porque ya en La Paz ya tienen toda su clientela y todo, nosotros aquí en el medio rural tenemos que buscar la forma de vender otros productos, porque si no entonces en el mercado grande ya tienen ellos sus propios proveedores, nosotros tenemos que hacerle la lucha para sacar unos centavitos”.
Se ha visto una gran diferencia de la colonia El Centenario ahora que es colonia: “Yo lo veo que va bien, tiene futuro, a pesar de que dicen que hay crisis la gente es muy trabajadora aquí de Centenario, le busca y le busca, hay va y hay vamos, tanto en el ganado bobino, como caprino, como de todos los animalitos, los llevamos al rastro y siempre estamos trabajando”.
La difícil situación de la pandemia a pesar de ser complicada y difícil de resolver a hecho que personas trabajadoras como Don Cándido, traten de buscar sus propias fuentes de empleo. Actualmente tiene 60 chivas, 35 puerquitos, y sigue trabajando para tener un poco de ingresos.
“Hay vamos con los animalitos, los cuidamos entre mis hijos y mis nietos, les estoy enseñando como se manejan los animales, no que ese celular no les trae cosa buena, hay que meterles algo en la cabeza que desarrollen para que se abran su propio camino el día de mañana. Que su inteligencia no se cierre en un circulo vicioso, sino que sea para bien de ellos, así nos enseñaron nuestros antepasados, nuestros abuelos. Nos decían quieres comer ve a traerme un poquito de leña, como vivíamos en el rancho, hay veníamos así todos chiquillos con algo de leña encima, pero ah ya te ganaste los frijolitos”.
“Cuando menos yo vivo de mi trabajo, yo no he sido empleado de nadie, todo el tiempo he trabajado por mí mismo. He luchado manejando animales, sembrando verduras, en apicultura y todo eso me ha dado centavitos para que salieran mis hijos de la escuela, hay los traigo, no porque estén casados ya los solté, y también ellos están aquí, además mi esposa me apoya mucho, pobres los dos iniciamos, cuando menos si se pone ella a regañarlos yo no digo nada y si yo los regaño ella no dice nada”.