La Paz, Baja California Sur (OEM-Informex).- El Doctor Humberto González Galván visitó San Pedro de la Presa, y algunos de sus ranchos aledaños, cabe destacar que actualmente en estos ranchos de las familias como los Amador Amador o los Higuera entre otros, se han estado dedicando a la ganadería, talabartería, cuchillería, la venta de quesos y productos de las cabras o las vacas, entre las actividades ecónomicas más principales en sus ranchos. Así mismo manifestarón que años atras, hace 30 años la agricultura fue una de las actividades economicas más importantes con un gran auge ante una buena fuente de agua de la cual todavía se ven beneficiados al poseer este líquido vital en los ranchos.
Sin embargo las nuevas generaciones han tenido una notoria migración hacía comunidades como El Centenario en una tendencia a migrar hacía la ciudad de La Paz y otros lugares que les permiten continuar con sus estudios, dejando abandonadas las prácticas y conocimientos de la agricultura. “Todos recuerdan una época no muy lejana de hace 30 años donde toda esa zona era una bonanza agrícola, precisamente porque abunda mucha agua, cada quién en su rancho tenía parcelas grandes de huertos con naranjas, mangos, limones, hicieron vino. Tenían abundancia de hortalizas, maíz el cual siguen cultivando, tenían calabaza”.
“Recuerdan esa época en la que había una gran abundancia de frutas y verduras en los zurcos sembrados, en las parcelas. El agua sigue estando presente pero ¿Por qué se ha venido abajo todo aquello? antes era un vergel todo verde, una bonanza de frutas, de verduras ¿Por qué se ha venido abajo, si sigue habiendo mucha agua? Ha tenido que ver con la migración, las nuevas generaciones, los hijos, los nietos, van creciendo y emigran hacía La Paz u otros lugares, muchos han venido al Centenario”.
“Abandonan los ranchos, la gente naturalmente va envejeciendo y cada vez se puede ocupar de menos extensión de tierra para sembrar, aquello poco a poco se viene abajo. La agricultura es muy celosa, todos lo saben. Ciudar la tierra, sembrarla, requiere mucho tiempo, cuidados, esfuerzo, conocimientos y la gente ya más mayor sola no lo ha podido sostener. Lo que ha estado ocurriendo me parece triste porque son lugares preciosos que tienen las posibilidades de ser autosustentables en muchos sentidos”.
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La forma de subsitencia tiene que ver con la ganadería, es muy común que tengan rebaños de chivas, de 50 hasta 200 o más chivas. Donde pastorear las chivas es una actividad preponderante de los ranchos: “De las chivas aprovechan todo, la leche, quesos, las pieles, el ganado de las vacas, las gallinas, puercos, toros y otros animales”.
Se dedicán a la talabartería, armando monturas, trabajando las pieles, entre otros productos del cuero, a la cuchillería, en el arte de hacer cuchillos contando con buena fama en este menester. El señor Amado, una persona de la tercera edad de cerca de 80 años, hace cuchillos y enseña este oficio el cual aprendió en Las Ánimas, cuando era joven.
