La Paz, Baja California Sur (OEM-Informex).- El presidente de la Asociación de Marinas Turísticas de México, Neil Schoyer, informó que debido a la contingencia sanitaria generada por la pandemia Covid-19, se encuentra restringida la navegación a yates y embarcaciones de recreo, pero sólo en los casos en que se trate de viajes de placer.
Aclaró que los de yatistas pueden transitar libremente por los litorales de Baja California Sur siempre y cuando su trayecto sea para regresar a su lugar de origen o para fondearse en algún sitio de las costas a fin de resguardarse, pero sin bajar a las playas ni permitir aglomeraciones entre las embarcaciones, mucho menos reuniones sociales entre tripulantes o pasajeros.
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Explicó que dese hace una semana las marinas de La Paz se encuentran a un 80% de ocupación luego de que un 10% de los que se encontraban atracados decidió en los últimos días regresar a sus lugares de origen.
Los yatistas y veleristas se encuentran haciendo la cuarentena, limitando sus salidas hacia tareas estrictamente necesarias, y las marinas operan con un mínimo de personal, respetando las instrucciones sanitarias como el distanciamiento social, el uso de cubrebocas y medidas constantes de sanitización en las instalaciones.
En los últimos dos años, La Paz se ha consolidado como el destino preferido de los turistas de muy alto poder adquisitivo, propietarios de yates de lujo y gran lujo, provenientes de varios países, particularmente de origen norteamericano y de acaudaladas familias mexicanas.
La temporada alta en las marinas es de noviembre a mayo, periodo en el que alcanzan casi un 100 por ciento de ocupación, con una oferta de 750 peines en 7 marinas, que generan en temporada alta una derrama económica de más de 15 millones de pesos.
La Paz es también el destino de la regata Baja Ha Ha, la más grande del mundo, con 155 veleros que llegan cada fin de año provenientes de San Diego EU, desde donde navegan 750 millas durante por más de 200 horas hasta entrar al Golfo de California, con una movilización de más de 600 turistas conformados por familias completas y una buena cantidad de jóvenes que permanecen navegando en el Golfo de California durante varios meses.
