La Paz, Baja California Sur. (OEM-Informex).- El vocero de la Diócesis de La Paz, el Padre Juan Gómez Esqueda, calificó de “preocupante” la legalización del consumo de la marihuana que aprobó el Senado de la República y pasó a la Cámara de Diputados para su discusión; el párroco vio el consumo de la cannabis como la puerta de entrada a drogas más peligrosas.
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Veo una contradicción; por un lado el gobierno doce trabajar en el combate a las adicciones y por otro lado legaliza el consumo de la mariguana, expresó.
Citó que con base a su experiencia en el Centro de Rehabilitación Kumi A.C, en donde se atiende a personas con alguna adicción, lograr la recuperación es algo muy complicado, aun y cuando en este centro se trabaja con un modelo totalmente distinto al de los llamados Anexos que operan particulares en todo el estado; aun así, la recuperación apenas llega al 50%, con el impacto que genera este fenómeno en materia de desintegración familiar, de pérdida de empleo y de violencia, entre otros.
El Padre Juan Gómez, lamentó que los legisladores solo hayan abordado la legalización de la mariguana desde el punto de vista lúdico, cuando lo mejor hubiera sido analizarse desde la óptica de su uso medicinal.
En ese mismo tenor, al párroco consideró que la legalización del consumo de esta droga no es una solución para que se acabe la violencia que genera la producción y el contrabando de este estupefaciente; recordó que incluso hay pueblos en donde existe el contrabando de sustancias como alcohol y cigarros, aún y cuando estén permitidos por la ley.
La violencia más vamos allá de qué se permita o no el consumo de una droga; la violencia nace desde la falta de educación de nuestros pueblos, la educación en la familia, la educación cívica de la cual carecemos; hay que ver los ejemplos de otros pueblos como Estados Unidos en donde no se acabó la violencia por el hecho de haber legalizado esta droga, añadió.
UN GRAN NEGOCIO
En todo caso, se debió de hacer sería hacer un análisis desde los estudiosos y de la gente que trabaja con los adictos para ver si están de acuerdo, dijo, e indicó que al igual que otras muchas plantas, la marihuana podría servir para uso medicinal, pero sin crear adicciones: Aquí el problema es que estamos hablando de una adicción… detrás de todo esto hay un gran negocio, expresó.
Vio como un hecho que la cámara de diputados apruebe la minuta que sobre esta reforma les envió la Cámara de Senadores.
Finalmente, el padre Juan Gómez dio a conocer que a causa de la pandemia de Covid-19, en el Centro Kumi no hay internamientos solo atención ambulatoria, y que en promedio se atienden a 70 personas al año, con un equipo de profesionales que trabajan de manera gratuita y con el respaldo de altruistas que aportan insumos en especie; con 11 años de trabajo continuo en un modelo que no implica encierro sino un contacto con la naturaleza, atención multidisciplinaria y compromiso de las familias.
CRISTIANOS CUESTIONAN A SENADORES
En entrevista por separado, el presidente del Frente Nacional por la Familia delegación Baja California Sur y líder religioso Alán Loubet Amador, manifestó su rechazo a esta iniciativa aprobada por el Senado de la República, y cuestionó el sentido del voto que sobre esta propuesta emitieron la senadora Guadalupe Saldaña quien se abstuvo, el Senador Ricardo Velásquez que votó a favor y la senadora Lucía Trasviña que no asistió a la sesión; en los hechos los tres senadores votaron en el mismo sentido, afirmó.
Consideró que legalizar la marihuana es un atentado en contra de la vida de las persona, y explicó que en su experiencia como ministro religioso ha visto como las familias afectadas por las adicciones de esta droga se han quebrado; se separan los padres, se van los hijos, pierden sus trabajos, empiezan a delinquir para poder cubrir su vicio, y todo esto hace que el hogar se destruya: además, de lo anterior, la marihuana es la puerta de entrada para otras drogas más fuertes, sentenció.
Consumir marihuana jamás ha generado nada bueno; lo único que hace es destruir familias, dijo, y no descartó que “el narcoestado se esté evidenciando”, legalizar las narcotienditas; es evidente, no hay ninguna preocupación del Estado por el bienestar de las familias ni por la prevención, agregó Loubet.
De qué te sirve cobrar impuestos sobre esta droga, si van a tener los hogares completamente destruidos y a la sociedad en decadencia, de por sí, la marihuana y otras drogas están al alcance de los jóvenes, pues ahora va a ser más fácil hacerlo, concluyó.
