La Paz, Baja California Sur (OEM-Informex).- El dirigente estatal de la Coparmex Gustavo Díaz Tronco denunció que con el inicio del año arrancó una campaña de terrorismo fiscal por parte de la Secretaría de Hacienda, en contra de contribuyentes a los que se les detecta alguna inconsistencia, así como una campaña de cobro sin precedente.
Alertó sobre la gravedad de estas acciones, debido a que la Secretaría cancela los sellos que permiten facturar a las empresas; algo que podría que pone en riesgo la operatividad de las mismas, ya que impide el seguir con las actividades empresariales.
Ante tal situación, el Consejo Estatal de la Coparmex se reunirá este día para analizar las acciones a seguir, y de antemano, están solicitando la intervención de la Procuraduría de Defensa del Contribuyente (PRODECON), a fin de que los asesore en esta problemática a la que califican de terrorismo fiscal.
Por otra parte, el líder del sindicato patronal alertó sobre el riesgo de una mayor inflación debido al aumento del IESP que afecta cigarros, y combustibles.
Y es que a partir del primer día de este año, la Secretaría de Hacienda aumenta el Impuesto Especial Sobre Producción y Servicios (ISPES) en un 7.37%, lo que se reflejará en los precios de productos de alto consumo como cigarros que pasarán de 70 a 75 pesos, el refresco de 1 litro de 22 a 23.62, y los de sabor aumentarán 1.40 pesos.
La gasolina Premium pasará de 22.45 pesos a 24, y la Magna aumentará 1 peso con 50 centavos.
Suscríbete aquí a la edición digital de El Sudcaliforniano
Los que seguirán con tasa cero será en la agricultura y ganadería en donde los productores anuales que no superan los 300,000 pesos seguirán con tasa Cero; en este mismo supuesto están los productos de higiene femenina y los alimentos para animales.
Díaz Tronco alertó sobre el riesgo de una mayor inflación, y aunque consideró que es legítimo que el gobierno federal pretenda mejorar sus ingresos, afirmó que los aumentos habrán de repercutir en toda la economía.
Finalmente recordó que el gobierno federal pretendía castigar con prisión preventiva los asuntos fiscales, sin dar oportunidad al contribuyente de defenderse en libertad, algo que finalmente no sucedió debido a que la COPARMEX interpuso un juicio que finalmente ganó.