La Paz, Baja California Sur (OEM-Informex).- Con una baja en la producción de hasta el 50 %y una disminución en el precio de 180 a 120 pesos el kilo, productores de higo del Valle de Vizcaíno concluyeron la temporada de cosecha 2020.
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Fuentes consultadas por El Sudcaliforniano informaron que el desplome en los volúmenes fue a causa del clima, ya que durante todo el verano las temperaturas registradas superaron a las de años anteriores, lo que provocó un estrés permanente en los árboles y la constante deshidratación del fruto en las ramas.
Para los agricultores se trata de un año atípico, el más caluroso de las últimas décadas, en una región desértica en donde la temperatura puede llegar hasta los 50 grados, pero solo durante algunas horas y de manera esporádica; en esta temporada, el clima en extremo caluroso se presentó de forma permanente, particularmente en el mes de septiembre época en donde en años anteriores el clima era de fresco a templado y frío durante la noche.
Contra las casi 400 toneladas de años anteriores, la zafra del 2020 apenas llegará a las 200, con higo de buena calidad pero en poco abundancia, según declaró a este medio Jesús Laguna, uno de los productores de esa región ubicada al norte del municipio de Mulegé.
Con respecto al desplome en el precio de 180 pesos que se pagaron en años anteriores a los 120 el kilo de la presente temporada, los productores lo atribuyen a un pacto de mercado entre los compradores, derivado de la incertidumbre del mercado Chino, país al que se destina casi la totalidad de la producción, y en donde aún no se reactiva al 100 por ciento el consumo a causa de la pandemia de Covid-19.
Algunos agricultores están analizando la posibilidad de incursionar en el mercado nacional en donde el higo producido en Vizcaíno se conoce poco, aunque en las pocas incursiones que ha tenido en las centrales de abasto y de la Ciudad de México y de Guadalajara los resultados han sido satisfactorios, con la particularidad de que el consumo es estacional durante la época de navidad y fin de año, cuando este fruto deshidratado se incluye en las canastas navideñas.
A lo anterior, habría que sumarle el envejecimiento de las huertas de higuera, ya que más del 70 por ciento de las aproximadamente 130 hectáreas establecidas tienen más de 30 años, algunas más de 50, con árboles que han concluido su ciclo productivo.
El único proceso que lleva el higo es un secado al sol y se calcula que por cada tres kilos en fresco resulta uno deshidratado, por lo que la producción de este año en fresco sería de aproximadamente 600 toneladas, contra las más de mil del zafras anteriores.
