La Paz, Baja California Sur, (OEM-Informex).- Algunas personas, manifestaron ante este medio el abuso sobre el cobro excesivo que restaurantes en playas como El Tesoro se encuentran cobrando en esta temporada.
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Los afectados señalaron que al llegar a la capital del estado procedente de Francia se les recomendó acudir a algunas playas de esta capital, así como las medidas que deberían tener al ingresar a estas, tales como el aforo de gente, la sana distancia, entre otras.
Al llegar a la playa el Tesoro, no contaban con el precio exagerado para tener derecho a la sombra, les indicaron que el costo de esta es de $300.00, y no tenían derecho a introducir alimentos por lo que aparte del costo de la palapa o sombra, sería el consumo de alimentos.
Procedieron a retirarse del lugar y acudieron a la playa el Tecolote, la situación fue la misma, nada más que el costo aquí aumentó a $500.00, cuando en temporada normal el cobro era de 200 pesos.
Los turistas reconocieron que la situación económica está complicada y el tiempo en que estuvieron sin dar el servicio en estos lugares se comprende, sin embargo, es mucho el abuso que se está generando por lo que desconocen en qué se basan para poner estos costos tan elevados, los cuales sin duda no ayudarán a que se mejor la situación económica de estos prestadores de servicios, al contrario, ahuyentan al consumidor.
A pesar de encontrarnos en fase 5, los turistas empiezan a llegar a la capital, llevándose este mal sabor de boca por los cobros excesivos
Ante esta situación optaron por no quedarse en ninguno de estos sitios, ya que además específicamente en la playa El Tecolote, se sobrepasó el aforo establecido por las autoridades, por lo que los protocolos de sana distancia desaparecieron durante este fin de semana en estos sitios.
Si bien la emergencia sanitaria a consecuencia de Covid-19, no ha pasado en Baja California Sur, y el semáforo se mantiene en naranja nivel crítico, a la entidad ya empezaron a llegar los primeros turistas, siendo Los Cabos quienes registran más visitantes, sin embargo, en La Paz, también se comienza a tener afluencia, pero ante estas situaciones que los propios foráneos los llaman como abuso, se complica que la economía pueda reactivarse.