La Paz, Baja California Sur, (OEM-Informex).- Dentro de la comunidad LGBT+ hay temas dolorosos, un gran número de personas diversas han vivido situaciones difíciles debido a su orientación sexual, uno de los temas que ya se encuentran en la agenda pública son las llamadas “terapias de conversión”, supuestos métodos que tienen la finalidad cambiar la orientación sexual, la identidad, o la expresión de genero de personas.
Estos tratamientos pueden ser psiquiátricos, psicológicos y hasta espirituales en aquellas personas diferentes a una heterosexualidad binaria cisgénero. Sesiones que prometen eliminar la homosexualidad, cuando en realidad se convierten en un tipo de tortura para quienes forman parte de la población LGBT+.
Para este medio de comunicación, una persona quien decidió mantenerse en el anonimato por motivos personales nos habló sobre la dura experiencia que tuvo en su adolescencia luego de que a los 16 años su familia decidiera enviarlo a una terapia de conversión para con ella “curar” su homosexualidad.
“Fue una situación difícil, me llevaron a un lugar donde yo pensé que era un consultorio de psicología y ahí empecé a ver que tenían algunas imágenes religiosas, principalmente, cuando me pasaron con la persona que estaría me explicó que no era una psicóloga, realmente fue muy honesta y ella me comentó que era más bien como una consejera familiar, yo no sabía que existían las terapias de conversión”.
Destacó que en aquel entonces no tenía información respecto a terapias de conversión, incluso vivió una etapa un tanto difícil dentro de su familia debido a que sus allegados no aceptaban su orientación sexual, situación que le provocó peleas constantes con sus padres y fue enviado a estas terapias.
“La persona era amable, simulaba ser una sesión de terapia psicológica pero no tenía ninguna herramienta de gestalt, me explicaba que Dios me iba a ayudar a cambiar, me compartía testimonios, contenido multimedia, música, libros de personas sobretodo hombres homosexuales que supuestamente había logrado cambiar, yo tenía que estar ahí pues en ese momento me sentía como un costal de arroz pues me llevaban de un lugar a otro sin voluntad propia”.
“Fue una etapa debilitante, yo no hablaba, fue una etapa muy conflictiva de mi vida que me causó depresión, me hacían ver que si era homosexual Dios no iba a amarme, que automáticamente estaba de lado del diablo, la sexualidad no tiene nada que ver con la religión, ese proceso para lo único que me sirvió fue para confundirme, para frustrarme y llenarme de ansiedad”.
Suscríbete aquí a la edición digital de El Sudcaliforniano
Hoy en día, esta metodología sigue existiendo, un gran número de personas LGBT+ son víctimas de timadores quienes aseguran que ser homosexual es una enfermedad, los métodos han cambiado pues hay quienes incluso han transformado su discurso, más no sus objetivos “desarrollar la heterosexualidad”.
Es importante que toda persona se informe sobre la diversidad sexual, padres de familia buscan lo mejor para sus hijos, pero en la búsqueda podrían ocasionarles grandes daños emocionales si se topan con las llamadas “Terapias de conversión”.