La Paz, Baja California Sur.- La puesta y el ocaso del sol en este puerto de La Paz son considerados dentro de la categoría de los más bellos del mundo y, ¡Qué mejor forma de engalanarlos, que teniendo como escenario el malecón!, sitio emblemático para los sudcalifornianos.
Desde el 2007, en este espacio los paceños y turistas podemos admirar interesantes esculturas.
Por tal motivo, El Sudcaliforniano, en esta ocasión, ha preparado una pequeña crónica con datos curiosos sobre las 16 esculturas que adornan este sitio.
Jesús del Caracol, la escultura más antigua: La obra realizada por la artista María Eugenia Sánchez Cuevas (Mena) es la más antigua ya que fue donada en 1998 por el Gobierno del Estado y la iniciativa privada.
En un principio la imagen se encontraba hundida en la pequeña ensenada de Balandra, con el fin de deleitar a las personas que practican buceo.
PUNTO DE REFERENCIA
La Paloma, punto de reunión: De acuerdo con los paceños, una de las esculturas que más identifican es la obra denominada “La Paloma”, creación del artista jalisciense Juan Soriano, en honor a la Paloma de la Paz.
Cabe mencionar que cuando se va a realizar alguna concentración social para manifestar o expresar alguna inconformidad esta escultura se ha convertido en un punto de referencia para los habitantes de esta localidad.
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Desaparece la escultura de El Ancla, la obra más alta: Desafortunadamente los actos vandálicos no han respetado estas fastuosas obras de arte. El monumento a El Ancla es un ejemplo de ello, ya que sufrió el robo de gran parte de su estructura de bronce y en la actualidad se desconoce su paradero. La escultura, que era la última obra que adornaba el paseo Álvaro Obregón, se ubicaba rumbo a la carretera escénica y ostentaba el título de la más alta, pues media casi seis metros de altura.
FIGURA ENTRAÑABLE
“El Viejo y el Mar”: Una de las obras más entrañables para los paceños es la de “El Viejo y el Mar”. La escultura del artista Guillermo Gómez mide tres metros de altura y simboliza la lucha del hombre y su capacidad para superar los obstáculos.
Mirando hacia el horizonte, esta preciosa obra que fue inaugurada en el 2004 evoca también al escritor norteamericano Ernest Hemingway y su novela.
“Jacques-Yves Cousteau y el acuario más grande del mundo”: Ubicada en el cruce de las calles República y Álvaro Obregón, la figura está dedicada a Jaques Costeau, explorador y viajero de origen francés quien dijo que el Mar de Cortés es el “Acuario del Mundo”. La obra es autoría de Salvador Rocha.
De igual forma, haciendo alusión a la frase del connotado buzo francés, también hay esculturas dedicadas a las Vaquitas Marinas, La Mantarraya, Aletas de Tiburón, Tiburones Martillos y la Ballena Jorobada.
Mitología
“Sirena con Delfines y otros personajes mitológicos”: No podían faltar las figuras evocando seres mitológicos. “Sirena con Delfines” del zacatecano José Kuribreña es una obra en donde una mujer-pez presenta a un delfín pequeño frente a su manada.
La escultura se ubica frente a la calle Guadalupe Victoria y fue donada por el nieto del artista, José Antonio Meade Kuribreña, excandidato a la presidencia de la República por el PRI.
Del mismo autor podemos encontrar a otro ser mitológico, “La Mujer en Nautilus”. Dentro de estos personajes también podemos observar la obra “Paraíso del Mar”, una de las más recurridas por los turistas.
“La Perla, la escultura más nueva”: Del escultor jalisciense Octavio González, quien ostenta el mayor número de obras en el malecón (seis), esta escultura es una de las favoritas de los viajeros, una enorme perla de espejo, evocando que La Paz es de los pocos lugares que se cultivan perlas de forma asistida.
Otras obras no menos importantes son “La Reina de los Mares” (Rocío Sánchez), “Lanzando la atarraya” (Octavio González) y “La Barca de Oro".
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