En lugares tan calurosos como La Paz donde el clima puede alcanzar hasta los 45° centígrados, las paletas de hielo, las nieves y los bolis, se vuelven esenciales para aminorar la sensación de calor, sin embargo cada vez podemos apreciar una notable disminución de vendedores ambulantes de bolis en las calles y esto se debe principalmente a que los tiempos han cambiado, y con ello han entrado nuevas tendencias y productos.
VENDEDORES
Antes era muy común que las personas vieran en la venta de bolis por comisión una vía para obtener un ingreso extra o bien vivir de ello, trabajando jornadas completas caminando por las calles de la ciudad agitando su campana, incitando a la gente a consumir sus productos.
El modelo de trabajo funcionaba de la siguiente forma: los vendedores acudían a las paleterías y neverías a recoger un carrito al cual agregaban el producto que quisieran, salían a las calles a venderlo y de regreso rendían cuentas de lo vendido a la paletería y de ahí tomaban su ganancia, es decir trabajaban bajo comisiones.
De esta forma las paleterías se dedicaban únicamente a surtir a los vendedores de producto económico, el cual era resistente a altas temperaturas y permitía que el negocio funcionara; de esta forma tanto ganaba el vendedor como la paletería.
Las paleterías más tradicionales en aquel tiempo eran La Fuente y La Pingüino, quienes tenían alrededor de 25 vendedores que recorrían la ciudad con sus productos, sin embargo el número de éstos empezó a disminuir al mismo tiempo que empezó a comercializarse el agua purificada embotellada y las hieleras, que permitían a las personas transportar sus productos a todas partes y mantenerlos fríos, por lo cual era la competencia directa de los productos de hielo.
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ACTUALIDAD
En nuestros tiempos aún seguimos viendo algunos vendedores de bolis en las calles principales o en zonas como el malecón, pero aún así son muy pocos en comparación con el pasado, en el cual en cada colonia había un vendedor que pasaba por las tardes a refrescar el día; hoy la población suele acudir directamente y sin intermediarios a las neverías y paleterías donde también ha evolucionado el negocio y ahora se dedican a despachar de forma directa a sus clientes.
