Los Cabos, Baja California Sur. (OEM-Informex).- Admiración causa un perro con signos de sí tener propietario quien a diario se da una vuelta por un negocio en donde venden croquetas, además de otros productos, pero estas las colocan en el piso y abiertas para que si algún animalito de la calle trae hambre pueda aprovechar la disponibilidad del encargado del establecimiento.
Señalan los trabajadores que el propietario deja las bolsas con croquetas así, abiertas, porque si algún perro llega con hambre pueda consumirlas, “dice mi patrón que al cabo no se las van a acabar, que tantas pueden comer, solo van de pasada, los perros no muy andariegos recorren todo el vecindario”.
En el municipio de Los Cabos antes de la aparición de la pandemia del covid-19, se llevaban a cabo continuamente campañas de esterilización a fin de disminuir la proliferación de los perros y gatos, jornadas exitosas gracias a la concientización y responsabilidad de los propietarios, que si quieren y cuidan a sus mascotas, no contribuyendo al nacimiento de más animalitos que pudieran andar en la calle sufriendo maltrato, hambre y enfermedad además de que pueden ser causantes de enfermedades en el ser humano como la rickettsia.
También en asociaciones protectoras de mascotas, recogen de la calle o reciben donaciones de perros o gatos que ya no pueden o quieren tener en el hogar, por distintas situaciones, por lo que los ponen en adopción si hay respuesta ciudadana.
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Así como el propietario de un establecimiento ubicado en Cabo San Lucas, con venta de todo para las fiestas infantiles, juveniles y de adultos, festejo del día de la mamá, del papá, del abuelo, del amor y la amistad entre otros, golosinas, desechables, piñatas, y croquetas que no se les niegan a un lindo perrito, que casi a diario lo visita, y tras comerse dos o tres figuritas e comida se va muy quitado de la pena, olvidando pagar la cuenta.