La relación entre un perro y su amo puede ser algo verdaderamente especial, un vínculo para toda la vida.
Existen historias reales de perros que después de la muerte fueron capaces de guardar fidelidad a la imagen de sus dueños, superando las barreras del cariño y la lealtad.
Un ejemplo de amor incondicional entre un perro y su amo es la historia del señor Héctor Lozano, quien tiene seis años con su entrañable “Lobito”, un lindo labrador con quien ha creado un vínculo entrañable.
Don Héctor, quien trabaja como lavacoches en el estacionamiento de la Catedral de Nuestra Señora de La Paz, mencionó que compró al perrito de recién nacido, eligiendo ese nombre en honor a otro perro que desafortunadamente murió atropellado.
“Tuve otro perrito (que ya estaba grandecito) al cual le había puesto también el nombre de ‘Lobito’, lamentablemente murió atropellado por una señora que venía manejando en estado de ebriedad, quien también murió al estrellarse contra un poste”, evocó.
Aludió que hace seis años pasó el terrible accidente y, con la esperanza de establecer un nuevo vínculo que le ayudara a sobrellevar esta terrible experiencia, buscó a su nuevo compañero.
CUIDA A SU MASCOTA CON VEHEMENCIA
Para quienes acuden constantemente a Catedral es muy común observarlos juntos, disfrutando de su compañía e incluso don Héctor con el propósito de brindarle comodidad a su mascota ha incorporado en su motocicleta una camita.
UNA DE TANTAS ANÉCDOTAS
Un día una muchacha (sin razón aparente) le aventó en su lomo una maleta y el perrito quiso defenderse. Las mujeres que se encontraban en el atrio de la iglesia se le fueron encima a la muchacha y la corrieron.
De igual forma su propietario recuerda que cuando “Lobito” tenía un año de edad resultó atropellado y sufrió una raspadura en su cabecita, por lo que arrancó llorando y salió en dirección hacia el malecón. Lo estuvo buscando y finalmente después de cinco días un policía lo encontró y se lo devolvió.
Para finalizar la entrevista, don Héctor recomendó a las personas que cuiden a los perritos, ya que dijo son seres vivos que merecen respeto y amor.
