Mulegé, Baja California Sur.- Durante el Campeonato Estatal de Beisbol en la categoría Nuevos Valores, que llevó el nombre de Guillermo “Memo” Gutiérrez, muchos jóvenes me preguntaron sobre la historia del estadio.
El terreno que ocupa actualmente el estadio de beisbol Estrellas de Cachanía, hasta la década de los años 60, era el basurero de Santa Rosalía, que se acrecentó con el huracán de 1959.
En esa época Julián “El Mocho” Santillán levantó los escombros donde hoy se encuentra “El Coloso de La Nopalera” y lo utilizó como yonque, donde tenía carros que luego los vendía por partes, siendo presidente municipal de Mulegé, Juventino Hernández Rubino, el primer presidente municipal de 1972 – 1974, entrañable amigo del “Mocho Santillán”. En una plática coincidieron en que el estadio de beisbol “Hidalgo”, que se encontraba en el mero centro de esta ciudad, Santa Rosalía necesitaba un estadio más grande, fue cuando El Tino Hernández le comentó al gobernador del estado Ángel César Mendoza Arámburo la posibilidad de construir un estadio de beisbol en esta cabecera municipal. La respuesta fue positiva, pero la pregunta era: ¿Dónde construirlo? Cuando “El Mocho Santillán” y el Tino Hernández optaron por limpiar el terreno que era utilizado como yonque, donde se construyó la primera etapa el estadio, siendo inaugurado el primero de mayo de 1974. Durante la construcción de estadio “El Mocho Santillán” y “El Tino Hernández”, trabajando coordinadamente, se dieron a la tarea de dar limpieza en todo alrededor del estadio, donde tiempo después se construyó la escuela preparatoria “Hermanos Flores Magón”, hoy COBACH.
Años después, en toda esa área se cuenta con una moderna unidad deportiva, la colonia Magisterial, que día con día va creciendo y toda esa área está totalmente habitada.
En ese año de 1974 la Liga Municipal de Beisbol de Primera Fuerza su primer presidente fue Cornelio “El Viejo” Domínguez y el último presidente en el estadio “Hidalgo” fue José Mendoza Castro, que siempre fue conocido como Pepe Mendoza.
El problema fue para ponerle el nombre del estadio, donde hubo muchas reuniones y no se ponían de acuerdo, fue cuando a Mario Vargas Aguilar se le ocurrió la idea de incluir a todos los grandes peloteros con una Placa de los Peloteros Inmortales, fue de donde nació a la idea de ponerle el nombre al estadio “Estrellas de Cachanía”.
