La Paz, Baja California Sur, Baja California Sur, (OEM-Informex).- Decenas de personas en automóviles y bicicletas se reunieron la tarde del miércoles en el malecón de La Paz para rendir un homenaje al joven periodista Ezequiel Lizalde quien perdió la vida debido a secuelas por Covid-19 el pasado martes 24 de Noviembre.
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Pasadas las 5 de la tarde, diversos colectivos sociales, periodistas y ciudadanos en general se reunieron en la zona dorada de la ciudad para rendir homenaje al periodista que ha tenido conmocionada a la ciudadanía desde el momento en que tuvo complicaciones luego de padecer el virus.
“Grité tu nombre de ida y vuelta todo el malecón, que todos te escuchen en tu lugar favorito para ver el atardecer. Mis pulmones fueron tuyos manito”, fueron las palabras del periodista Alan Flores Ramos quien cuidó de Ezequiel Lizalde en los momentos difíciles de la enfermedad.
El gremio de periodistas de Baja California Sur está de luto, uno de los colaboradores que dio voz a miles de ciudadanos ya no está, con 24 años de trayectoria, Ezequiel Lizalde se convirtió en un luchador de las causas sociales, defendió el agua y la vida, peleó por las injusticias y se convirtió en aliado de diversos colectivos comprometidos con el medio ambiente.
La Red de Periodistas de Baja California Sur emitió un comunicado dirigido a las autoridades para que den seguimiento y aclaren la situación de vulnerabilidad que vivió el joven periodista ya que debido a la sobrecarga de trabajo tuvo una recaída la cual lo llevó a que perdiera la vida.
“Se violentaron derechos laborales y hoy, como lo hicimos en su momento, insistimos en el llamado a que las autoridades de la Secretaría del Trabajo y Previsión Social federal, la Secretaría del Trabajo y Desarrollo Social de Baja California Sur, y el Instituto Mexicano del Seguro Social investiguen presuntas negligencias y actuaciones contrarias a la responsabilidad social corporativa, máxime en tiempos de pandemia”.
El periodista es y será recordado en Baja California Sur por su intachable trabajo, por escuchar a los más necesitados, por exhibir verdades que incomodan y por ser el amigo y compañero que el periodismo necesita.