Mauricio Hernández Ch.
El Ayuntamiento de La Paz se encuentra en una severa crisis y aunque este tema no es algo nuevo, en los últimos meses ha adquirido un interés especial sobre todo por el deseo de que se logre superar esta situación y se pueda tener una recuperación en el otorgamiento de los servicios públicos que emanan de esta instancia.
El panorama que se tiene no es el mejor y con la llegada de un nuevo alcalde, los ojos están puestos en él para ver qué es lo que se hace para revertir los señalamientos de corrupción y malos manejos que se han dado de manera histórica. El por su parte no ha quitado del dedo del renglón y sigue manifestando que puede lograrse una recuperación, pero para ello se debe empezar por abatir los rezagos históricos que existen en diversos rubros, entre los que destaca agua potable, el predial y, en fecha reciente, el de la dirección de seguridad y tránsito, donde se estima que la deuda de infracciones guardadas, podría aproximarse a los 30 millones de pesos.
La falta de dinero y las deudas que encontró, son los obstáculos más importantes que ha tenido que enfrentar y aunque sus detractores ya están criticando la supuesta falta de resultados, es fácil entender que en esta situación es realmente muy poco lo que se puede lograr y es por ello que se ha alentado de manera especial la creación de programas que permitan a la autoridad obtener los ingresos que se requieren.
En estos días y con la participación de los regidores, se han estado ideando opciones que les permitan recaudar el dinero que se necesita, el cual, sumando la última deuda encontrada en el Organismo Operador de Agua Potable, Alcantarillado y Saneamiento, que es de poco más de 507 millones de pesos, nos lleva a una deuda municipal de 2 mil 291 millones de pesos, lo que se antoja difícil de poder sortear sin la conciencia de la ciudadanos.
En la contraparte se encuentra la deuda que acumulada por ciudadanos morosos, quienes en diversos rubros, deben poco más de mil millones de pesos y ahora, la idea es lograr que esta cifra se pueda recibir para poder mitigar un poco las dolencias que se generan por la carencia de efectivo. Debido a que, el mayor índice de deuda se tiene en el impuesto predial, se trazó un plan de descuentos para quienes hagan su pago de manera anticipada, el cual ira descendiendo conforme pase el tiempo, ya que como lo ha expresado el alcalde, no se puede premiar a quienes no pagan y dejar de reconocer a los que sí cumplen.
Hasta donde se ha visto, el alcalde conoce las circunstancias en las que se encuentra el Ayuntamiento y aunque ha habido aspectos que no le fueron notificados, tiene una idea de lo que se debe hacer, por eso ha buscado la forma de darle al dinero la eficacia que necesita, ya que son varios los aspectos que tiene que cumplir en su panorama inmediato y sin que estén acomodados por nivel de importancia, tenemos las exigencias de los trabajadores que deben recibir sus salarios, los pagos que no pueden postergarse como es el de la CFE y también tenemos las demandas de los habitantes, quienes, dicho sea de paso, esperan muchos resultados y respuestas del nuevo Ayuntamiento.
Esta necesidad es la que lo llevó a pedirle al Congreso del Estado, que se permita a las autoridades municipales cobrar el uso de suelo y los prediales a la CFE, Telmex y compañías de cable, además de buscar la forma en que las escuelas también paguen sus consumos como es el caso del agua, sin embargo el tema ha provocado críticas y también a la aparición de muchos “expertos”, quienes emiten sus criterios sin tomar en cuenta la base del planteamiento, el cual surge por la necesidad de que las dependencias federales y empresas, paguen como lo hacemos todos los mortales.
También han aparecido defensores por el tema de la carros que no han pagado sus multas y que señaló, podrían ser detenidos como una sanción o una medida para lograr el cobro, aquí lo que hay que tomar en cuenta, es que el asunto está dirigido a los que deben multas de hace años y extrañamente, siguen circulando sin que haya habido un mecanismo de cobro, el tema claro que debe hacerse mediante los términos legales y no creo que sea malo obligar a las personas a pagar sus multas, pero al parecer, hay muchos a los que esto no les agrada del todo y prefieren que las cosas sigan así, como hasta ahora.
En medio de todo este ambiente y aderezado con el corte que de tres horas que efectuó la CFE, se encuentra la deuda del Oomsapas, la cual -todo parece indicar- se ocultó de forma deliberada la administración de Armando Martínez Vega, la cual no sólo evitó darla a conocer en el proceso de entrega-recepción, sino que evitó mostrar los documentos que la avalan.
Ante este hallazgo, Muñoz Álvarez dijo que se recabará toda la información que sea necesaria para entregarla a los departamentos contables y si se determina que esto debe tener una consecuencia penal, entonces se procederá como lo establezcan los reglamentos.
Aunque la cantidad es muy grande y esta se genera por una importante lista de pagos que no fueron realizados, el tema que provoca una molestia especial es la omisión de pago al cuerpo de Bomberos, institución a la que se le deben 2.2 millones de pesos, los cuales, como es del dominio público, se obtienen por un pago que hacen los usuarios, de tal forma que su obtención no debería representar ningún problema para la autoridad, pero ahora se sabe que los bomberos no han recibido estos millones.
No son extrañas o nuevas las necesidades que la institución atraviesa también por falta de dinero y tampoco han sido pocas las ocasiones en las que se han sabido los problemas para pagar la nómina, por eso lo que sí resulta ser muy extraño es que el comandante de la corporación, Raúl Sánchez Castro, haya permitido que se tuviera esta omisión y aunque no se sabe cuales hayan sido estos motivos, es fácil suponer que la influencia haya tenido su origen en el mismo alcalde.
