/ domingo 1 de octubre de 2023

El nombre de La Paz

Este 3 de octubre se cumplirá un nuevo aniversario de la fecha en que Sebastián Vizcaíno dio el nombre actual a la que es, desde el primer tercio del siglo XIX, la capital de Baja California Sur.

Con destino a California partió Vizcaíno de México el 12 de mayo de 1596, en otro intento virreinal por explorar aquellos territorios.

Acompañado de su hijo de 7 años de edad, llevaba 3 navíos, 230 hombres, 14 caballos, armas, pertrechos, municiones, 12 piezas de artillería y bastimentos para varios meses.

Después de tocar Acapulco llegaron al puerto de Salagua (Manzanillo) el 5 de julio, donde fueron embarcados más hombres y caballos, maíz y legumbres. De ahí zarparon el día 23 siguiente y arribaron a Mazatlán el 13 de agosto. Luego de once días reemprendieron el camino hacia California, a donde llegaron el 3 de septiembre en una ensenada cercana al cabo de San Lucas, a la que el expedicionario denominó “San Sebastián”. Aquí se realizó un primer contacto con los nativos, quienes recibieron amistosamente a los recién llegados. La colonia fue llamada “San Felipe”, y la región “Nueva Andalucía”. (De haber prosperado este nombre, los cabeños serían ahora neoandaluces.)

El 10 de septiembre, después de hacer algunos reconocimientos tierra adentro, se hicieron a la vela para explorar la costa interior del golfo hacia el norte:

“Habiendo caminado veinte leguas [poco menos de cien kilómetros] descubrí otra ensenada grandísima y alguna parte de tierra llana que me pareció algo buena [...] Entramos a reconocerla y hallamos en unos carrizales agua dulce muy buena como de río [...] Hallamos muchos indios que se nos dieron por amigos [...] los cuales nos trajeron gran cantidad de las ciruelas ya dichas.”

El 3 de octubre siguiente, “salí del dicho puerto que llamamos de La Paz y fui en seguimiento de mi viaje.”

La expedición regresó a Salagua el 7 de diciembre del mismo año, dejando impuesto su nombre definitivo al sitio que desde 1830 es la capital sudcaliforniana, junto a otras aportaciones notables, especialmente para la geografía y la antropología de esta provincia.

Escasamente se pudiera justificar la osadía de Vizcaíno al pasar por encima de la designación cortesiana: para hacer el viaje a California (primero de dos) tuvo que haber consultado la documentación que existía sobre la presencia del conquistador de Tenochtitlan en esta tierra; en ella se encontraba el Auto de posesión del puerto y bahía de Santa Cruz, del 3 de mayo de 1535:

“… en nombre de su majestad; y en señal y acto de la dicha posesión, el dicho señor marqués puso por nombre al dicho puerto y bahía el puerto e bahía de Santa Cruz, y se anduvo paseando por la dicha tierra de una parte a otra y echando arenas… y con su espada dio en ciertos árboles que allí estaban y mandó a la gente que allí estaba le tuviesen por gobernador de su majestad de aquellas dichas tierras, e hizo otros actos de posesión…”

Vizcaíno, 62 años después, reconoció que el sitio era el mismo de la colonia que estableció don Hernando en esa fecha, por lo que resultaba inimaginable que la hubiera dejado sin un nombre en aquella ocasión.

El de California, por otra parte, que impusieron expedicionarios de Cortés a Cabo San Lucas, ya se aplicaba por extensión a toda la provincia, considerada un conjunto de islas, la mayor de las cuales era Santa Cruz.

Don Hernán había fallecido en 1547, de manera que poco podía inconformarse por el atrevimiento.

Así, la efeméride viene a sumarse a las conmemoraciones del mes de la Sudcalifornidad, como el congreso sudcaliforniano determinó que se diese la designación a octubre de cada año, pues en él ha ocurrido buena cantidad de acontecimientos relevantes en la historia de esta mitad peninsular.

Todavía está faltando el gobierno, el organismo social o la asociación privada que asuma la iniciativa de colocar un monumento, o al menos una placa, que en algún sitio de la playa recuerde a los paceños e informe a los visitantes ese hecho vinculado a lo más remoto de la historia y al más vivo presente regional.

Este 3 de octubre se cumplirá un nuevo aniversario de la fecha en que Sebastián Vizcaíno dio el nombre actual a la que es, desde el primer tercio del siglo XIX, la capital de Baja California Sur.

Con destino a California partió Vizcaíno de México el 12 de mayo de 1596, en otro intento virreinal por explorar aquellos territorios.

Acompañado de su hijo de 7 años de edad, llevaba 3 navíos, 230 hombres, 14 caballos, armas, pertrechos, municiones, 12 piezas de artillería y bastimentos para varios meses.

Después de tocar Acapulco llegaron al puerto de Salagua (Manzanillo) el 5 de julio, donde fueron embarcados más hombres y caballos, maíz y legumbres. De ahí zarparon el día 23 siguiente y arribaron a Mazatlán el 13 de agosto. Luego de once días reemprendieron el camino hacia California, a donde llegaron el 3 de septiembre en una ensenada cercana al cabo de San Lucas, a la que el expedicionario denominó “San Sebastián”. Aquí se realizó un primer contacto con los nativos, quienes recibieron amistosamente a los recién llegados. La colonia fue llamada “San Felipe”, y la región “Nueva Andalucía”. (De haber prosperado este nombre, los cabeños serían ahora neoandaluces.)

El 10 de septiembre, después de hacer algunos reconocimientos tierra adentro, se hicieron a la vela para explorar la costa interior del golfo hacia el norte:

“Habiendo caminado veinte leguas [poco menos de cien kilómetros] descubrí otra ensenada grandísima y alguna parte de tierra llana que me pareció algo buena [...] Entramos a reconocerla y hallamos en unos carrizales agua dulce muy buena como de río [...] Hallamos muchos indios que se nos dieron por amigos [...] los cuales nos trajeron gran cantidad de las ciruelas ya dichas.”

El 3 de octubre siguiente, “salí del dicho puerto que llamamos de La Paz y fui en seguimiento de mi viaje.”

La expedición regresó a Salagua el 7 de diciembre del mismo año, dejando impuesto su nombre definitivo al sitio que desde 1830 es la capital sudcaliforniana, junto a otras aportaciones notables, especialmente para la geografía y la antropología de esta provincia.

Escasamente se pudiera justificar la osadía de Vizcaíno al pasar por encima de la designación cortesiana: para hacer el viaje a California (primero de dos) tuvo que haber consultado la documentación que existía sobre la presencia del conquistador de Tenochtitlan en esta tierra; en ella se encontraba el Auto de posesión del puerto y bahía de Santa Cruz, del 3 de mayo de 1535:

“… en nombre de su majestad; y en señal y acto de la dicha posesión, el dicho señor marqués puso por nombre al dicho puerto y bahía el puerto e bahía de Santa Cruz, y se anduvo paseando por la dicha tierra de una parte a otra y echando arenas… y con su espada dio en ciertos árboles que allí estaban y mandó a la gente que allí estaba le tuviesen por gobernador de su majestad de aquellas dichas tierras, e hizo otros actos de posesión…”

Vizcaíno, 62 años después, reconoció que el sitio era el mismo de la colonia que estableció don Hernando en esa fecha, por lo que resultaba inimaginable que la hubiera dejado sin un nombre en aquella ocasión.

El de California, por otra parte, que impusieron expedicionarios de Cortés a Cabo San Lucas, ya se aplicaba por extensión a toda la provincia, considerada un conjunto de islas, la mayor de las cuales era Santa Cruz.

Don Hernán había fallecido en 1547, de manera que poco podía inconformarse por el atrevimiento.

Así, la efeméride viene a sumarse a las conmemoraciones del mes de la Sudcalifornidad, como el congreso sudcaliforniano determinó que se diese la designación a octubre de cada año, pues en él ha ocurrido buena cantidad de acontecimientos relevantes en la historia de esta mitad peninsular.

Todavía está faltando el gobierno, el organismo social o la asociación privada que asuma la iniciativa de colocar un monumento, o al menos una placa, que en algún sitio de la playa recuerde a los paceños e informe a los visitantes ese hecho vinculado a lo más remoto de la historia y al más vivo presente regional.